Cada vez es más crítica la situación económica y financiera de los productores vitivinícolas del Valle de Uco, en la provincia de Mendoza, una de las principales zonas del país para el cultivo de varietales de alto valor como el Malbec, por lo que la dirigencia rural reclama una urgente ayuda financiera.
La actividad es vital para la economía de Mendoza, como ya se ocupó con amplitud LA NACION en su edición del miércoles último. "Estamos a 45 días de la cosecha y el productor no sabe de qué manera va a poder cosechar considerando que aún no termina de cobrar la uva de la campaña pasada", dijo el presidente de la Sociedad Rural del Valle de Uco, Mario Leiva.
Agregó que la falta de rentabilidad que aqueja a los productores es el resultado "de un proceso de medidas desacertadas que establecieron un marco de alta inflación y un atraso en el tipo de cambio que producen inconvenientes al momento de exportar, generando una acumulación de stock que termina impactando en el mercado interno".
Según un análisis de la entidad mendocina, el margen de rentabilidad que le quedó al productor del Valle del Uco en la última campaña fue de 2120 pesos por hectárea. "Quiere decir que para cubrir las necesidades de una familia más los costos de producción de la finca se necesitan como mínimo 30 hectáreas, pero debajo de esa escala está el 90 por ciento de los productores del departamento de San Carlos, que son entre 5500 y 6500 viñateros", dijo Leiva.
Cabe mencionar que San Carlos junto con los departamentos de Tupungato y Tunuyán conforman el Valle de Uco, que tiene en su conjunto unos 8500 productores, explicó el dirigente.
Respecto del precio que reciben por la uva, según Leiva, en la última vendimia les pagaron 400 pesos el quintal cuando hace tres años cobraban 620 pesos .
El precio se vino abajo por la sobreproducción de vino blanco. "Hay un excedente de 200 millones de litros que deben eliminarse ya sea en exportación o en destilación para elaborar alcohol", explicó.
"Para la destilación necesitamos 500 millones de pesos que les pedimos a los gobiernos nacional y provincial y no tenemos respuestas. Vale recordar que el Estado le debe al sector 240 millones de pesos en concepto de reintegros a la retenciones a las exportaciones de vino", dijo Leiva.
Otro reclamo que se hace desde la Sociedad Rural del Valle de Uco es la agilización del crédito directo en boca de bodega. Este sistema consiste en que la bodega certifica la cantidad de uva entregada por el productor, éste va a al Fondo para la Transformación y Crecimiento de Mendoza (FTYC) y recibe el dinero para afrontar cosecha y otras obligaciones.
En el mismo sentido se expresaron días pasados 14 entidades vitivinícolas de la provincia al rechazar anuncios de los gobiernos de Mendoza y San Juan en cuanto a regulaciones del mercado del vino.
En un comunicado, las entidades representativas de cooperativas de productores y bodegueros, reclamaron, entre otras medidas, la urgente aplicación de los fondos necesarios para retirar del stock actual "al menos 200 millones de litros de vino blanco" y advirtieron que de "no haber acciones efectivas se realizará una movilización el 15 de este mes".