Mientras avanzan con la cosecha de trigo, los productores denuncian que los compradores les ofrecen entre US$ 30 y 50 dólares por tonelada menos respecto de lo que podrían pagar.
La distorsión ocurre por la política de cuotificación de las exportaciones del Gobierno. Hace tres semanas autorizó la venta de 1,5 millones de toneladas del ciclo 2014/2015 (1,2 millones de toneladas de grano y 300.000 toneladas de harina), volumen que en el sector consideran insuficiente para que haya una competencia activa entre molinos y exportadores y esto se refleje en mejores precios.
Los descuentos fueron una constante con Guillermo Moreno al frente de la Secretaría de Comercio y ahora se repiten con su sucesor, Augusto Costa, y el ministro Axel Kicillof. El año pasado, con una cosecha chica, de 9,2 millones de toneladas, las distorsiones no fueron tan notorias. Ahora, con un volumen esperado de entre 11,5 y 12 millones, más un remanente del ciclo pasado que algunos proyectan en 2 millones, son contundentes. Los exportadores ya tienen comprados 2,3 millones de toneladas, más que lo autorizado por el Gobierno.
Las distorsiones generan tensiones en la cadena y el interior de sus eslabones. Por ejemplo, con el último cupo, exportadores agrupados en Ciara-Cec tuvieron "chispazos" sobre el reparto interno del volumen. Allí juran que "todo ya se arregló".
"Acá los compradores ofrecen entre 950 y 1000 pesos la tonelada, lo que da unos 112 a 117 dólares. Están en 30 a 40 dólares menos de lo que deberían", expresó Guillermo Aiello, productor de Hughes, en el sur de Santa Fe.
En Bell Ville, en el sudeste de Córdoba, el panorama comercial no es distinto. "A la mayoría de los productores le ofrecen 50 dólares menos de lo que podría ser", señaló Federico Proietti.
Exportadores admiten descuentos, pero le echan la culpa al sistema de ROE (registros de exportación) y cupos del Gobierno. El ministro de Agricultura, Carlos Casamiquela, prometió apenas asumió un sistema "casi automático" para los ROE pero en el sector aún desconocen su implementación.
Entre enero y parte de abril pasados no hubo descuentos en el precio. Luego saltó a US$ 20 a fines de abril, 30 dólares en mayo, US$ 40 en junio y hasta US$ 50 ahora, en plena cosecha. "Si pagaran el FAS teórico (valor descontadas las retenciones y gastos comerciales) deberían estar en 180 dólares por tonelada (abonado por los exportadores), pero hay descuentos de 50 dólares", detalló Leandro Pierbattisti, asesor de la Federación de Acopiadores de Granos.
Precios bajo presión
Según un informe del productor Néstor Roulet, en zonas del centro sur de Córdoba hay molinos pagando 850/900 pesos cuando podrían abonar $ 2160. Roulet llegó a este último número al analizar la participación histórica del trigo sobre el precio del pan. El valor del pan ronda los $ 18 [el mismo cuando en 2012 el trigo llegó a costar casi $ 4000] y si se considera la participación histórica del cereal en este producto, de un 12%, eso da $ 2,16 pesos por kilo que, llevados a una tonelada, representan los $ 2160. Hay una brecha de 1300 pesos sobre lo pagado al productor.
Roulet detalló además que allí los exportadores ofrecen $ 900 cuando podrían estar en $ 1567. En este caso, el diferencial es de $ 667 por tonelada o unos US$ 70. "Hoy se pueden hacer negocios de trigo al norte de África a US$ 250 y los exportadores pagar un FAS teórico de US$ 184; sin embargo, pagan US$ 115, una diferencia de US$ 69 a su favor", expresó.
Según el informe, si toda la cosecha de trigo más el remanente el ciclo pasado se comercializaran con los actuales descuentos el sector de la producción perdería $ 12.922 millones o unos US$ 1500 millones.