Con las últimas tormentas que ocurrieron en gran parte de La Pampa Húmeda y en especial en las zonas productivas bonaerenses, la evolución de los cultivos de trigo siguen teniendo serios problemas. La ocurrencia de estos fenómenos que descargan gran cantidad de agua en poco tiempo, con fuertes ráfagas de viento y ocasional caída de granizo, hacen un escenario complicado para la correcta evolución del cereal. Además, se debe considerar que las altas temperaturas más la alta humedad genera la posibilidad de que comiencen los problemas fúngicos como ocurrió en otros años.
Todos recuerdan la presencia del Fusarium con un ataque masivo, generando gran cantidad de trigo fuera de estándar panadero. A tal punto fue esta situación que en aquel momento las cámaras arbitrales crearon un nuevo estándar para el trigo forrajero. Todavía estamos lejos de poder considerar una circunstancia similar, pero este año las complicaciones climáticas vienen ocurriendo demasiado seguido. También se debe tener en cuenta que la provincia de Buenos Aires se encuentra con las capas freáticas al máximo de su capacidad. Al llover, es muy difícil que el agua escurra rápidamente, encharcando los campos, re inundando los ya destruidos caminos vecinales, no permitiendo el paso de ninguna maquinaria pesada. “Este es un año donde todo sale mal para el trigo” comentaba desanimado un importante productor de la bonaerense localidad de Benito Juárez.
Desde el aspecto de la situación del mercado, continuamos con precios “manejados” a gusto de los compradores de la exportación y de la industria molinera. En el caso de los exportadores compran poco, a precios bajos no coincidentes a la realidad internacional, poniendo sus condiciones en lo que respecta a la calidad comercial, condiciones de entrega y de pago. Los molineros, siguen viendo que no les va a faltar trigo durante todo el año 2015. Esto está garantizado porque el Gobierno Nacional continúa sin abrir los registros de exportación. Estuvieron a punto de hacerlo por 1,5 millones de toneladas, pero frenaron el trámite al ver las complicaciones que vienen sufriendo los cultivos de trigo.
El panorama de precios internacionales continúa siendo de chatura en los valores, con alguna posibilidad de mejora puntual, pero sin un cambio de tendencia hacia arriba. Existen algunas posibilidades de que lo que está ocurriendo en los países vecinos con sus cosechas, influya positivamente en aumentos de los precios en la región. En los últimos días en Paraguay, Uruguay y sur de Brasil tuvieron tormentas por demás virulentas generando trastornos importantes a los cultivos de trigo que quedaban por ser cosechados. Esta circunstancia podría influir en los precios de Sudamérica, una vez que se confirmen las pérdidas si es que ocurrieron.
Todas las miradas de la cadena comercial argentina de trigo están puestas hacia arriba. Pero no mirando lo que ocurre en Chicago o en EEUU, sino hacia el cielo viendo que el clima torne a ser más benévolo para el mal tratado trigo nacional.