En la campaña pasada hubo un escenario de falta de agua; deshidratado, decolorado, con espigas cortas y granos chuzos por heladas tardías, el rinde para trigo bajó 5 qq/ha por debajo de la media de la región.
El 70% del área sembrada con trigo se encuentra en condiciones buenas a muy buenas. El rinde del cultivo no expresará todo su potencial, pero sí estará por encima de los promedios. Las temperaturas elevadas, junto con sequía superficial de suelo, la muerte de macollos por heladas y, finalmente, el severo ataque de roya redujeron las expectativas de obtener los máximos rendimientos. Sin embargo, si comparamos esta campaña con la del año anterior el escenario climático actual resulta muy favorable. En octubre del 2013 el trigo definía su rendimiento sin reservas de agua en el perfil en el 80% de la región (ver imagen debajo). Este factor limitante posicionó a los rindes en un 15% por debajo de lo normal para la zona. Actualmente el trigo tiene condiciones ideales de humedad edáfica en pleno periodo de cuaje y llenado de granos. La primera proyección de rinde promedio de trigo para la región núcleo se sitúa en 37 qq/ha, lo que dejaría una producción de 2,4 millones de toneladas.
De todas maneras, al cultivo todavía le queda un importante tramo por recorrer. Según los pronósticos de mediano plazo, habría un Niño más moderado y empezaría a ejercer su influencia más tarde de lo que se presuponía, específicamente a partir de los meses de noviembre y diciembre. Esto favorecería las condiciones para las labores de cosecha y aliviaría la presión hídrica luego de un año de abundantes lluvias que elevaron las napas freáticas por encima de los niveles usuales de profundidad.