Desde junio pasado la oleaginosa acumula una pérdida en torno al 16%, tanto para la mercadería disponible, como también para los valores de la campaña 2014/15. El principal motivo de semejante caída, es la excelente producción esperada de Estados Unidos.

El informe de área sembrada emitido por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), hacia fines de junio pasado, ha generado el primer impacto negativo en los precios, ya que se relevaron más hectáreas de las esperadas, alcanzando así un aumento de 3,3 mill de has. respecto de la campaña 2013/14. Posteriormente, las excelentes condiciones climáticas llevaron a elevar mes a mes los rendimientos proyectados, hoy en un nivel record de 3,13 t/ha. a nivel país.

La producción proyectada de 106 mill. de t., cambia una característica fundamental que el mercado de los últimos años no tenía: elevados stocks finales luego de la demanda proyectada. Como se observa en el gráfico, la relación stock/consumo en Estados Unidos, pasa de ubicarse de entre 4% y 6% desde 2007/08 a 13,5% para la campaña 2104/15.

Si bien aún no se ha comenzado con la cosecha, y resta todo un año comercial para ver el comportamiento de la demanda, ya el organismo estima un aumento de la misma en 6 mill. de t. Usualmente, China presiona sobre los bajos inventarios del país del norte, generando un alza en los precios, situación que hoy parece poco probable.

Relación stock/consumo en Estados Unidos. Fuente: Globlatecnos sobre la base de USDA.

Por otro lado, un aumento en la intención de área de Sudamérica para el ciclo que comienza y un año “Niño” por delante, proponen un alto potencial de producción. Como es de esperar, hacia los próximos meses se dará la siembra en esos países, con sus problemáticas e incertidumbres. Un ejemplo de esto, pueden ser complicaciones en la siembra en Argentina, por los excesos hídricos que se dan actualmente en gran parte de la región pampeana. Sin embargo, difícilmente se deje de sembrar, por lo que habrá que aprovechar esos momentos de volatilidad, para tomar coberturas de precios. Un mercado sobre abastecido, al igual que el de los cereales, hacen que las posibilidades de suba queden postergadas para más adelante, cuando nuevamente la demanda sea noticia, y la nueva siembra en Estados Unidos sea planteada.

Otro factor no menor que ha estado impactando en las bajas en los precios de los commodities, es la apreciación del dólar frente al resto de las monedas como el euro o el yen. Al suceder esto, el poder de compra de los demandantes disminuye, ya que los commodities son valorizados en dólares.

También debe considerarse las relaciones de precio que se establecen entre los diferentes granos. Esta variable debe ser considerada en los análisis de largo plazo, ya que se supone que en el momento en el que uno de ellos comienza a encarecerse, por un efecto de sustitución tiende a apreciarse el resto de granos que pueden demandarse. En este sentido la relación de precios entre la soja y el maíz en Estados Unidos hoy en día se encuentra muy favorable a la soja, quiere decir que la soja esta cara frente al maíz, como se puede observar en el gráfico. Es por eso que en el mediano plazo esta relación deberá tender al promedio, bajando uno y subiendo el otro, pero habrá que ver en que dimensiones lo realiza cada uno, partiendo del supuesto que el maíz está en valores piso de precios.

Relación de precios futura de Soja/Maíz 2014-15. Fuente: Globlatecnos sobre la base de CME.

Ante este escenario internacional, e incertidumbre local, se plantea una campaña con números negativos en todas las regiones productoras. Los valores a cosecha en 245 u$s/t., no alcanzan para cubrir los costos, principalmente en los campos arrendados y más aún en zonas alejadas de los puertos donde el flete incide fuertemente. Por esto, habrá que plantear bien las necesidades financieras de las empresas, al igual que los valores objetivos al cual cada una aspira. En este sentido, las herramientas de coberturas en los mercados, tendrían que ser evaluadas, ya que como mencionamos anteriormente, la cotización puede seguir en baja si los factores climáticos acompañan.