SANTA FE.- El gobierno santafecino dispuso la vacunación obligatoria del total de cabezas vacunas de la provincia, unos 7 millones, en un intento por evitar la propagación del carbunclo o ántrax, después de la muerte de una persona que trabajaba con cueros de animales contaminados en San Jerónimo del Sauce, departamento Las Colonias, 60 kilómetros al oeste de esta capital. En la reunión que realizó la Comisión Provincial de Sanidad Animal se indicó que, además del caso fatal en humanos, murieron unos 30 animales por la misma enfermedad.

Si bien la presencia del carbunclo no es nueva en la región y, según declaró el ministro de la Producción, Carlos Fascendini, "es perfectamente controlable", es necesario "estar alertas y tomar todos los mecanismos de prevención". Añadió que se trata de "una vacuna barata, que puede ser aplicada en momentos en que se hacen otras vacunaciones, como el caso de la aftosa".

Federico Berger, del Colegio de Médicos Veterinarios, aclaró que el costo en sí mismo no tiene incidencia sobre el número anual de un establecimiento. "Si pensamos en muertes de animales y en el riesgo para la vida humana, es una vacuna absolutamente barata." Agregó que la enfermedad "se transmite por contacto con los cadáveres", por lo que resaltó la importancia del "consumo de carne que provenga de lugares seguros". Fascendini expresó que la vacunación obligatoria debe estar acompañada de "una serie de medidas de prevención y de seguridad en el manejo de los alimentos, por eso también está involucrada en el monitoreo de la situación la Agencia Santafesina de Seguridad Alimentaria".