En medio del freno a las exportaciones de carne vacuna que dispuso por 15 días frente a las subas en la hacienda y en los precios al consumidor, la Secretaría de Comercio tuvo ayer un gesto con los frigoríficos exportadores: por la tarde, permitió la salida de algunos embarques parados, aunque no trascendió el volumen exacto.
"Nos han desbloqueado fundamentalmente algunos productos enfriados, cortes Hilton para la Unión Europea [de alto valor comercial] y mercadería para Chile", confió a LA NACION una alta fuente de la industria exportadora.
El gesto del Gobierno no significa, no obstante, que haya liberado completamente los embarques.
Además de recibir esa noticia, los frigoríficos exportadores, agrupados en el Consorcio de Exportadores de Carne (ABC), fueron convocados nuevamente para pasado mañana a Comercio para evaluar cómo continuarán los embarques.
El miércoles pasado, el subsecretario de Comercio, Ariel Langer, prohibió por 15 días las exportaciones por la suba de precios en la hacienda, que treparon entre 10 y 15% en las últimas dos semanas, y ante la advertencia de inminentes aumentos en torno del 8% al consumidor por parte de los carniceros.
El secretario Augusto Costa paralizó los embarques pese a que éstos, al representar sólo 6% de lo producido, no tienen incidencia sobre los valores del mercado interno.
Ayer, en Comercio vieron un respiro en los precios de la hacienda. Con una entrada de 10.765 cabezas en el Mercado de Liniers, algo por encima de lo habitual, se registraron bajas de entre 30 y 50 centavos para novillos y hacienda liviana.
Aunque Comercio dejó entrever su amenaza de intervenir Liniers, ayer los operadores actuaron con normalidad. "Si hubo llamados a algún comprador para moderar los precios no se notaron porque las bajas se dieron con la mayor oferta", contó un operador.
Si bien se dieron mermas en los precios, en el balance de la semana el Índice Novillo del Mercado de Liniers trepó un 7,48%, al pasar de 16,282 a 17,500 pesos.
A todo esto, en ese mercado advertían que este fin de semana continuaban las lluvias en diferentes zonas productoras y podrían verse afectados los ingresos en la semana entrante.
Al margen de lo que ocurre con los precios, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, prometió anteayer en una reunión con trabajadores de los frigoríficos que se subirá el peso mínimo de faena para que haya más volumen de carne. Sin embargo, en el sector consideran que para aumentar el peso mínimo de faena (en vivo, hoy en 300 kilos, pero que no se cumple según se denuncia) primero se deben liberar las exportaciones y no aplicar restricciones.
Exportar más
"Si no hubiera limitaciones a las exportaciones, los productores tratarían de producir un animal más pesado y habría así más carne para el mercado interno", señaló Ignacio Gómez Álzaga, consignatario.
"Para subir el peso promedio de la faena se requiere abrir las exportaciones", coincidió Ernesto Ambrosetti, economista de la Sociedad Rural Argentina (SRA).
Según el consultor Víctor Tonelli, la Argentina podría estar produciendo casi 150.000 toneladas más de carne por año si se volviera a tener la proporción de novillos en la faena que había en 2005, el último año antes de que el Gobierno interviniera para frenar exportaciones. En ese momento, la proporción de los novillos era del 60% y hoy cayó a 34% "porque no se deja exportar".
"En 2005, los novillos que pesaban en promedio 282 kg res representaban el 60% del total de la faena de machos castrados, que eran 7.350.000 cabezas. En tanto, otros machos castrados representaban el 40% y eran terneros y novillitos que pesaban en promedio 191 kg, con lo que el peso promedio por res faenada de machos castrados era de 245,5 kg", explicó Tonelli. Agregó: "En los primeros siete meses de 2014, el total de novillos sobre el total de machos castrados participa con el 34%, con peso promedio de 277 kg res, mientras que las otras categorías de machos castrados (ternero y novillito) participan con el 66% con un peso promedio de 202 kg res, con lo que el peso promedio por macho castrado hoy resulta de 228 kilos".
Considerando estos datos, la diferencia entre el peso obtenido por macho castrado en 2005, en el último año sin restricción a las exportaciones, y la actualidad es de 17,5 kg de res (228 kilos de 2014 versus 245,5 kilos de 2005).
"Volviendo a la proporción de faena de novillos y de machos castrados livianos de 2005, con la misma cantidad de cabezas tendríamos 144.000 toneladas más res con hueso, que equivalen al 80% de las exportaciones previstas para este año. Esto permitiría incrementar el ingreso de divisas sin quitarle un solo kilo a la mesa de los argentinos", subrayó.