“Líder en Innovación Tecnológica” es el concepto con el que DuPont Agro propone descubrirse en este Encuentro junto a quienes saben de las necesidades cambiantes en los mercados actuales.
Desarrollando soluciones innovadoras y tecnológicamente sustentables para responder a las nuevas necesidades globales de alimentación, DuPont Agro descubre cómo producir más y mejores alimentos, para una población mundial que crecerá exponencialmente en los próximos años.
Varios fueron los temas desarrollados durante el X Encuentro Nacional de Monitoreadores, tanto referidos a las dificultades que se están encontrando en el control de malezas, insectos y enfermedades, como para los cultivos de soja como de maíz, mas allá de los eventos transgénicos que tengan para su protección.
Dificultad en el control de malezas
Actualmente existen en nuestro país 9 especies de malezas declaradas resistentes al herbicida glifosato (EPSPS), de las cuales 7 son malezas gramíneas (monocotiledóneas) y 2 son malezas de hoja ancha (dicotiledóneas). Dentro de las malezas gramíneas encontramos a Urochloa panicoides, Eleusine índica, Cynodon hirsutus, Lolium multiflorum, Echinocloa colona, Lolium perenne y Sorghum halepense.
En lo que respecta al control químico y como consecuencia de esta problemática se nota un marcado aumento en el uso, no sólo de herbicidas graminicidas post-emergentes en soja, sino también en el uso de PRE-EMERGENTES.
Du Pont, con su tecnología Ligate® - STS®, mostró en este evento, que es una herramienta eficaz para el control de esta problemática creciente.
A través de esta tecnología el productor puede controlar un amplio espectro de malezas: gramíneas anuales, maíz guacho RR y malezas de hoja ancha, con una muy buena residualidad y excelente selectividad para su cultivo de soja STS®.
El gran desafío de todos los involucrados es lograr que este tipo de herramientas sea perdurable en el tiempo, dado que no es esperable que aparezcan nuevos modos de acción en los próximos años.
Para esto es necesario llevar adelante ciertas prácticas culturales y químicas que sin duda van a ayudar a evitar que las malezas sigan incorporando resistencias a los diferentes modos de acción de los herbicidas, como son:
Prácticas Culturales:
- Uso de semilla fiscalizada (libre de contaminación con malezas)
- Limpieza de cosechadora
- Rotación de cultivos
- Incorporación de cultivos de cobertura
- Ajuste de distanciamiento entre hileras y densidad del cultivo a sembrar.
Estrategias Químicas:
- Rotación de herbicidas con distintos modos de acción
- Uso de herbicidas pre y post emergentes.
- Control de las malezas antes de la cosecha
Control eficiente de Spodoptera en maíz
Desde los primeros estadios, el cultivo de maíz está expuesto a diferentes plagas. En la actualidad existen maíces no transgénicos al control de insectos (convencionales, Flint, pisingallos, dulces) y con eventos incorporados destinados a controlar algunas especies de lepidópteros, pero que comienzan a mostrar diferentes niveles de daños.
Unas de las plagas que producen mayores daños económicos en el cultivo de maíz es Spodoptera frugiperda, conocida también por Cogollero o Militar. Ataca en diferentes regiones del país, teniendo generalmente mayor presencia y población en las regiones como el norte de Córdoba, NEA y NOA.
Puede afectar al cultivo a lo largo de todo su ciclo, comportándose como cortadora en los primeros estadios vegetativos, como “cogollera” en pleno crecimiento, e incluso puede ingresar perforando la espiga ya en etapas reproductivas.
DuPont registró a fines de 2011 su Diamida Antranílica Coragen® para el control de Spodoptera en maíz, y desde ese momento se utiliza regularmente en maíces que, por genética, presión de plaga y condiciones ambientales, requieren protección superior a la aplicaciones conocidas. Durante la presente campaña Coragen® demostró una vez más, ser el mejor insecticida del mercado para el control de Spodoptera en maíz. Su contundencia y persistencia fueron claves para el manejo de la plaga en un año como este donde estuvo por encima de cualquier daño histórico que se recuerde.
Considerando que la eficacia y la persistencia son las dos características
principales de los insecticidas, podemos concluir que Coragen® a una dosis de 75
cc por ha en una aplicación presentó en diferentes ensayos realizados una
eficacia igual al resto de los productos empleados en el control de Spodoptera
frugiperda a 3 días de su aplicación; pero que se destacó por una mayor
persistencia en el tiempo, llegando hasta los 21 días con diferencias
importantes de protección.
El maíz y los hongos
En el caso específico del cultivo de maíz, el tizón común, causado por el hongo Exserohilum turcicum, es la enfermedad con mayor presencia, en maíces de siembra tardía y de segunda siembra, presentándose todas las campañas, con severidades que varían según la respuesta genética del material frente a la enfermedad. En las campañas 07/08 y 09/10 causó, en híbridos susceptibles, pérdidas de hasta el 40% de rendimiento.
La roya común del Maíz (Puccinia sorghi) es la otra enfermedad de importancia principalmente en siembras de primera y en aquellos veranos que presentan condiciones humedas y temperaturas templadas.
Los datos de las campañas 07/08 y 08/09 indicaron que produjo mermas de hasta el 30% en híbridos susceptibles.
La utilización de fungicidas mezclas de principios activos provenientes de familias químicas como los triazoles y las estrobirulina, brindó soluciones de control a enfermedades como Roya del Maíz o Tizón, responsables estas de disminuciones de rendimiento potencial importante.
Stinger®, fungicida mezcla de Dupont cuyos componentes activos son Picoxystrobin y Cyproconazole en una proporción 2:1, ofrece un excelente poder curativo y preventivo post infección. La molécula de Picoxystrobin le provee una gran movilidad dentro de la hoja por su acción translaminar y su potencial de vapor le permite llegar a aquellas hojas que no hayan sido alcanzadas por la pulverización, brindando un poder de control mucho más efectivo. Por otra parte, la mejora en la sanidad de las hojas que más aportan al llenado de la espiga, permite un mejor balance de azúcares en la planta, especialmente en el tallo, generando una disminución importante en los niveles de enfermedades que atacan el tallo de la misma, minimizando notablemente los niveles de quebrados de tallos, lo que permite un mejor manejo de cosechas diferidas al invierno, sin sufrir pérdidas por plantas que caen al piso.
Stinger® en sus dosis de 500-600 cc/ha contribuye a defender entre un 10 y 40 % el rinde de nuestro maíz.