Las mismas solo han sido removidas en forma temporaria luego de que se concretara la larga ventana de buen tiempo de abril y que permitiera trillar gran parte de la soja en la zona núcleo. En efecto, la circulación predominante del este, del noreste y del norte, han mantenido siempre alto el contenido de humedad en las capas medias y bajas de la atmósfera, afectando gran parte del país, incluso e inusualmente, zonas de la Patagonia. Ante esta alta disponibilidad de humedad, cualquier perturbación que genere inestabilidad y ascenso de aire, favorece la condensación y la formación de nubosidad. Esto es lo que se ha venido observando en estas tres semanas de mayo, temporarias ventanas de insolación, continuadas por extendidos períodos de coberturas nubosas, susceptibles de producir lloviznas o eventualmente lluvias de mayor porte, tales como las del viernes de la semana pasada y durante el martes y miércoles de la actual.
Las lluvias que se representan en el mapa computan los registros observados en las tres semanas transcurridas del mes de mayo. Los acumulados son excesivos para la época. Gran parte de BA, LP, sur de SF, corredores del centro norte de CB, centro norte de SF, buena parte del NOA, han superado el nivel normal de precipitaciones de todo el mes de mayo. Aparecen excepciones en áreas reducidas y excepcionales como en el corredor Marcos Juárez Rosario o el norte de ER, donde el ambiente húmedo no se ha traducido en lluvias excesivas, lo cual claramente no ha sido la regla.
Más allá de los atrasos de la cosecha, principalmente sobre y al sur de la cuenca del Salado bonaerense, la logística de la post cosecha ha sido trastocada por el comportamiento pluvial de mayo. Los caminos rurales intransitables y la difícil entrada a los campos, hace muy complejo el transporte de mercadería a puerto. Esto, claro está, también ha afectado el movimiento de cosechadoras hacia el sur, situación que podría comenzar a normalizarse conforme se afiancen las mejores condiciones del tiempo previstas para estos últimos diez días de mayo.
En las próximas horas se espera un fuerte cambio de circulación. El frío y el sol ganarán progresivo protagonismo.
Si bien la cosecha de soja en gran parte de la zona núcleo está muy avanzada respecto de lo que sucede al sur, el cambio de condiciones ambientales que se irá concretando a partir de hoy, será muy bienvenido por los productores. La evolución del otoño hacia condiciones invernales es muy esperada no en toda la región pampeana, básicamente, para normalizar el patrón de humedad y disminuir el potencial de precipitaciones. Recordamos que en esta época de cosecha las jornadas con baja tasa de radiación y altos niveles de humedad son muy perjudiciales, complicando y encareciendo todas las tareas vinculadas al acondicionamiento del material recolectado.
En este sentido, se espera que este último tramo de mayo de un respiro, acercando las primeras jornadas de frío persistente y sobre todo imponiendo una tasa de radiación más elevada, con disminución de la humedad relativa.
Viendo el lado positivo de la situación presente y tomando la misma como punto de partida para las siembras, el escenario es muy auspicioso. Con una semana de buen tiempo, los lotes destinados a trigo u otro cultivo de invierno, dispondrán de perfiles con muy buena carga hídrica, garantizando el paso del invierno.
El frío y el sol son los más esperados por estos días en toda la región agrícola del país.
- Por CCA - exclusivo Agrositio
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