El sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU) dispuso ayer un paro por
tiempo indeterminado del personal que cumple tareas en los remolcadores, que
operan en las terminales portuarias de la ciudad de Puerto General San Martín y
de la localidad de Timbúes, a 27 kilómetros al norte de Rosario, informaron
fuentes gremiales.
La medida fue dispuesta a partir de las 15, afectando directamente a las
tareas de amarre y desamarre en las terminales de Nidera, Toepfer, Bunge y Noble
y a una decena de buques cerealeros.
Además, no se prestará ningún servicio a ningún ultramarino que haya recibido
operaciones de estiba en Timbúes o Puerto General San Martín, que complete carga
en los puertos de Quequén (Necochea) y Bahía Blanca.
Las mismas fuentes señalaron que el conflicto entre el SOMU, el sindicato
Unidos Portuarios Argentinos (SUPA) y la Cooperativa de Trabajo Portuarios de
Puerto General San Martín se origina para determinar qué gremio representará a
los tripulantes de los remolcadores.
Desde el Ministerio de Trabajo de la Nación aseguran que SUPA no cumplió con
el compromiso acordado el mes pasado, cuando se dispuso una tregua por el
término de 120 días.
El 17 de abril el Somu y el Sindicato Unido Portuarios Argentinos (SUPA)
firmaron la paz por 4 meses. En ese momento, ambos sindicatos habían desconocido
el poder de las carteras laborales de Rosario como la nacional y fueron citados
a Casa de Gobierno por el jefe de Gabinete para evitar medidas de fuerza que
obstaculizaran las exportaciones agrarias en el momento en donde comenzaba el
pico exportador, recordó el diario El Cronista.
Pero el pedido de Capitanich, quien había intervenido en la discusión, no fue
suficiente. El SOMU asegura haber adelantado en el Ministerio de Trabajo que el
SUPA no cumplió con el compromiso de tregua pactado por 120 días.
Los portuarios esperan que Capitanich vuelva a llamar a Hermes Juárez,
secretario general del SUPA; y a Omar Suárez, secretario general del SOMU, para
saber por qué incumplieron el acuerdo de paz social firmado hace apenas 21
días. Fuentes oficiales aseguraron al matutino que hay mucha bronca desde
Jefatura de Gabinete y del Ministerio de Trabajo con Juárez, por lo que se
desconoce la decisión que tomará el Gobierno.
Por el conflicto y la medida de fuerza, no sólo se retrasa la carga de los buques, sino que otros no pueden salir de los muelles, lo que genera sobrecostos diarios de u$s20.000 promedio; y la paralización de unos 8.000 camiones diarios que no pueden descargar la soja y subproductos que transportan.