La incertidumbre no es la que corona la demanda. Por el contrario, es la oferta la que está coronada por ella.

Como una tortilla, las perspectivas se han dado vuelta. Pocos piensan hoy que, con la entrada de la cosecha sudamericana, los valores de la gruesa se desplomarán.

La influencia de China, el mayor comprador global de soja y sus derivados es decisiva.

En definitiva, el consumo de China sigue en pie; no deja de ser un importador neto, de relevancia mundial. La presión a la suba en los valores viene de la mano no sólo de nuevas importaciones, sino también del hecho de no haber anulado los negocios pactados como, hace poco, se daba por seguro.

En este contexto de demanda acentuada, hay una persistente caída en las existencias, fundamentalmente de soja, en EE.UU.

Las recientes estimaciones de Oil World (Alemania), del Consejo Internacional de Granos (IGC) y de Safras (Brasil) se han modificado claramente en vista del clima adverso de la región sudamericana. Y así llegaron los recortes.

La mencionada consultora agrícola Safras & Mercado redujo su estimación en el volumen a cosechar, para Brasil, a 86,1 millones de toneladas. Algo más de 6% menos a lo estimado en enero pasado.

Durante la campaña, Brasil quedó sometido a sequías y excesos de precipitaciones. El clima no sólo ha afectado la productividad sino también la calidad.

Nos referimos a la soja.

La peor sequía en décadas ha castigado buena parte del país y los cultivos sufrieron sus efectos. En cuentagotas se registraron las precipitaciones gran parte del cinturón agrícola desde el inicio del año.

Era generalizada la previsión de que desplazaría a EE.UU. del primer puesto. La cruda realidad es que los a pronósticos que indicaban una campaña de producción récord ya no tienen sentido.

Los analistas de Wall Street, así como gran parte de quienes se dedican a la predicción económica, habían augurado una mega cosecha por parte de Brasil, que dejaría en segundo lugar a la de EE.UU. Pero ya nadie piensa así. La mayoría estima que la producción brasileña de soja llegará a cerca de 85 millones de toneladas.

A nivel regional, la oferta atraviesa problemas como la incertidumbre sobre el normal desenvolvimiento logístico en el vecino país, las precipitaciones que afectan la trilla en este país (y eventualmente en el nuestro también) y cierta reticencia a vender por parte de los productores argentinos a resultas de la inflación imperante.

El cuadro siguiente es del Consejo Internacional de Granos y muestra la reciente evolución de los valores, partiendo de una base igual a 100 para enero de 2000.

Evolución de los precios de granos y oleaginosas

Para el caso de la soja, el organismo ha publicado el siguiente cuadro:

Precio de la soja (FOB, Golfo de México)

En los últimos días, han aparecido fundados temores por la entrada de parte del ejército ruso a Ucrania, más precisamente a Crimea. Por ello, los mercados tendieron claramente a la suba en granos como el trigo y el maíz.

Afortunadamente, las declaraciones del presidente ruso han puesto paños fríos sobre el cuadro y así quedo más alejado el potencial conflicto bélico entre Rusia y Ucrania.

Aunque, en rigor, existe cierto recelo sobre el futuro comportamiento de Rusia. En definitiva, Putin acaba de afirmar “ Cuál es el motivo para el uso de las fuerzas armadas? Por supuesto, lo haríamos en un caso extremo. Sería el último recurso”.

Se sabe que las operaciones de exportación no sufrirán mayores problemas en el puerto de Odessa. Este es la perspectiva, al menos por ahora.

Cada día que pasa, más difícil resulta prever el porvenir. Pero, parece que las estrellas nos acompañan. Al menos, desde afuera del país.