Revela con nitidez como los denominados vientos de cola dejaron de gravitar favorablemente para la Argentina, al menos en la proporción que reinó hasta los primeros meses del corriente año. Aunque, voluntariamente las autoridades económicas se encargaron de desaprovechar en el último bienio con la inexplicable decisión de imponer restricciones a las importaciones que debilitaron a las exportaciones, porque afectó la fluidez de la producción nacional, y con el atraso cambiario.
Sólo a partir de la pérdida de apoyo popular en las legislativas de octubre, se decidió intentar neutralizar el efecto de la deflación de las materias primas que más exporta la Argentina con la aceleración del ritmo ajuste cambiario que aplicó el Banco Central, en particular desde el 18 de noviembre cuando se anunciaron los cambios en el gabinete económico.
Vientos de cola dejaron de gravitar favorablemente
Sin embargo, en la medida en que se demoren las acciones destinadas a poner freno a la tasa de inflación, y por tanto al aumento sostenido y generalizado de los costos de las empresas, y se siga una política cambiaria previsible, con ajustes diarios que superan al nivel equivalente de las tasas de interés, poco cabe esperar de tonificación de las exportaciones.
Más aún, cuando casi en forma compulsiva se induce a las cerealeras a que ingresen divisas a través de prefinanciación de exportaciones, en un escenario de fuerte aceleración de la tasa de cambio y precios internacionales en baja.
Tendencia claramente declinante
El Índice de Precios de las Materias Primas del Banco Central de la República Argentina disminuyó 2,1% en noviembre de 2013 respecto al mes anterior, valuado en dólares. "Esta baja estuvo explicada por disminuciones en ocho componentes del indicador, parcialmente compensada por aumentos de los porotos y aceite de soja y la carne bovina.", comunicó la autoridad monetaria.
En el último mes se destacaron, por su incidencia, las mermas de las cotizaciones de los pellets de soja 4%, trigo 5,8%, petróleo crudo 2,7%, oro 3,1%, maíz 1,3%, cobre 1,8%, aluminio primario 3,7% y acero 0,6%. Por el contrario, subieron los precios de los porotos de soja 2,1%, la carne bovina 2,9% y aceite de soja 0,5 por ciento.
El IPMP se redujo13,0% en comparación con el nivel de igual mes de 2012, explicado por un comportamiento descendente de todos los componentes del índice, con excepción del petróleo.
En el acumulado de los once meses se el IPMP registró una disminución de 4,8 por ciento.