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En lo que va del año se vendió una cifra récord de tractores, cosechadoras y sembradoras en el mercado local. Pero los especialistas remarcan que no se trata de una demanda genuina, sino más bien de la incertidumbre cambiaria y de un refugio contra la inflación. El rol de los créditos subsidiados.

A comienzos del pasado mes de mayo La Política Online reveló que muchos productores agropecuarios venían comprando en cantidades significativas camionetas 4x4 como refugio contra la inflación en el marco del cepo cambiario impuesto por el Gobierno nacional.

En ese momento (periodo enero/abril) se hablaba de más de 90.000 camionetas vendidas en el mercado local, una cifra 20 por ciento superior a la registrada un año antes cuando todavía existían algunas otras alternativas de inversión.

Pero ahora, el dato gira en torno al notable crecimiento que vienen registrando las ventas de maquinaria agrícola como producto, principalmente, de la incertidumbre cambiaria sumada a la posibilidad de acceder a créditos con condiciones muy ventajosas.

Para tener una idea, según datos difundidos por el Indec, en los primeros nueve meses de 2013 (enero/septiembre) se vendieron en el mercado argentino unos 2923 tractores importados versus 2534 en el mismo período de 2012.

También aumentaron de manera considerable las ventas de tractores producidos en la Argentina: en enero-septiembre de 2013 se comercializaron 2534 unidades versus 1369 en el mismo período del año pasado (+85%), según publica el sitio especializado valorsoja.com.

En tanto, en los primeros nueve meses se vendieron 543 cosechadoras fabricadas en territorio nacional contra 327 en el mismo período de 2012, al tiempo que las ventas internas de sembradoras fueron de 1641 unidades en enero-septiembre contra 1497 en el mismo lapso del año pasado (+10%).

Pero, a qué responde este hecho: ¿se trata de una demanda genuina o bien responde a una suerte de "especulación monetaria" por parte de los productores con mayor espalda financiera?, fue el interrogante que LPO planteó a algunos conocedores del tema.

Para el consultor económico y agropecuario, Salvador Di Stefano, "el fenómeno registrado con las ventas de maquinaria agrícola es similar al que se viene dando con los automóviles de alta gama que tuvieron un boom al venderse en pesos al tipo de cambio oficial".

"Muchos productores observan que, al no haber demasiadas opciones de inversión en pesos, es conveniente refugiarse en un bien que conserva su valor en dólares", explicó Di Stefano. "Cubrirse en maquinaria agrícola resulta una buena alternativa para proteger el ahorro", agregó.

En otras palabras, la brecha entre el dólar oficial ($ 6,11) y el blue ($ 9,72) en un contexto con un 25 por ciento de inflación anual está promoviendo -ante la prohibición de adquirir dólares en el mercado legal- la venta de bienes durables como moneda de reserva de valor.
Pero también hay otro dato clave que explica el boom que registran las ventas de maquinaria agrícola en el país: la mayor parte de las operaciones de máquinas de origen nacional se realiza por medio de créditos a tasa subsidiada del Banco Nación.

En este sentido, la entidad bancaria estatal ofrece una línea de créditos con un plazo de hasta cinco años y una tasa fija en pesos del 7,5% y 9,5% anual para Pymes y grandes empresas agropecuarias, respectivamente (un regalo si se tiene en cuenta la inflación oficial).

Como sea, cabe aclarar que, si bien muchas empresas locales del sector presentan máquinas supuestamente nacionales, lo cierto es que la mayor parte de los componentes son adquiridos en países del exterior.