• Maiz

Continúa el retraso en las labores de siembra de maíz con destino grano comercial. Si bien durante las últimas dos semanas se vienen registrando precipitaciones en zonas en donde la falta de humedad marcaba un severo déficit hídrico, aún no se ha recompuesto el perfil de manera tal que el productor pueda garantizar una óptima implantación del cereal.

A la fecha se ha sembrado el 18,5 % del área proyectada en 3.460.000 hectáreas para esta campaña. En la última semana se registró un avance de 4,9 puntos porcentuales, y el retraso interanual sería de -13,3 %.

Las zonas en donde se registran los mayores retrasos en las labores de siembra son Córdoba, el Oeste de Buenos Aires y ambos núcleos. Sumado a esto, la campaña presentaría el mayor porcentaje de siembras tardías de la historia. Durante los últimos años, la relación entre siembras tempranas y tardías (a este último se le suman los cuadros de segunda ocupación) se encontraba repartida en 80/20 respectivamente.

Las últimas dos campañas, y gracias a los buenos resultados de los maíces en fechas tardías, este porcentaje fue variando y se fue aportando una mayor proporción a fechas de diciembre (pasando a una distribución de 70/30). Para esta campaña, que aún se encuentra en los primeros estadíos de la siembra, se prevé que esta relación se incline aún más hacia las siembras tardías. De este modo, se ajustaría una relación de 60/40, apalancado esto por la ausencia de precipitaciones durante los meses de invierno y comienzos de la primavera.

Por otra parte, debemos mencionar un problema que está teniendo una relevancia mayor, como son las malezas presentes en los cuadros barbechados, que inclusive en algunos casos demuestran resistencia o tolerancia a ciertos herbicidas.

Hoy por hoy el productor se encuentra abocado a combatir las malezas, en busca de eficientizar el aprovechamiento del agua disponible en los perfiles y garantizar una buena implantación del cereal.

Se pueden observar en el centro del área agrícola nacional varios cuadros en los cuales se está roturando por manchones o sobre las borduras, en busca de combatir el efecto negativo por la presencia de malezas.

En el Núcleo Norte, las lluvias registradas se dieron de manera heterogénea, con lo cual no se logra revertir de manera uniforme el déficit hídrico de la región. Algo similar ocurre en el Núcleo Sur, en donde el productor no ha podido finalizar con las tareas de cobertura de los materiales de siembras tempranas, relegando así un alto porcentaje a fechas tardías sobre el mes de diciembre.

Hacia el Centro-Este de Entre Ríos, las precipitaciones caídas durante el pasado fin de semana ayudan a recuperar en parte la humedad necesaria para que el cultivo de maíz siga vegetando en buenas condiciones, y a su vez lograr la emergencia de aquellos cuadros implantados hace algo más de 10 días.

Caso contrario se observa en la otra zona primicia, el Centro-Norte de Santa Fe, en donde hoy los cuadros de maíz se encuentran en etapas vegetativas, con acartuchamiento de hojas y síntomas visible de un estrés hídrico. Las regiones sureñas de la provincia de córdoba, que registraron lluvias moderadas la semana pasada, han avanzado con la siembra aprovechando la humedad disponible en los primeros centímetros del suelo.

En las últimas horas se relevaron nuevas precipitaciones en dicha provincia, que podrían ayudar a incorporar algunos lotes más. Posterior a esto el productor decide trasladar las coberturas con maíz a fechas tardías, para evitar así los inconvenientes que puede llegar a tener debido al Mal de Río IV.

Por último, el Norte de La Pampa-Oeste de Buenos Aires avanza con la cobertura del cereal aprovechando los últimos días de la ventana óptima de siembra, antes de decidir trasladar el resto del área a fechas tardías del mes de diciembre. Esto mismo se observa en el centro bonaerense, en donde las intenciones de siembra mejoran y se está aprovechando la humedad disponible en el suelo.

  • Girasol

Lluvias registradas desde nuestra anterior publicación alivian de forma parcial el déficit hídrico en sectores del margen oeste de nuestra región agrícola, y permiten retomar la siembra con mayor fluidez.

Por tal motivo, durante los últimos siete días la incorporación de cuadros a nivel nacional avanzó un 4 %, elevando el área sembrada al 33,2 % de la superficie proyectada en 1.630.000 hectáreas para la campaña en curso, al mismo tiempo acortando la brecha interanual al -4,5 %. Sobre el Centro-Norte de Santa Fe, en donde la ventana óptima para la incorporación de cuadros finalizó semanas atrás, precipitaciones registradas durante el pasado fin de semana reactivaron la siembra tardía en varios sectores del sur y este de la región.

Los cuadros incorporados sobre el margen oeste (Ceres, Tostado y Villa Minetti) comienzan a desplegar el primer par de hojas verdaderas bajo condición de déficit hídrico. Hacia Humboldt (22 mm) informaron una fuerte presión de orugas cortadoras en lotes que también se encuentra desparejos.

En términos generales, toda la región refleja un retraso en el crecimiento y desarrollo de sus cuadros, debido a la falta inicial de buenas condiciones hídricas y, por otra parte, a las bajas temperaturas relevadas durante el período siembra/emergencia en lotes implantados durante la primera tanda de siembra.

Hacia el norte, en la región NEA, lluvias registradas durante el fin de semana continúan aliviando el déficit hídrico en parte de Chaco y el este de Santiago del Estero. Pese a ello, muchos cuadros muestran un escaso desarrollo y habrá que esperar durante a las próximas semanas a fin de poder evaluar la respuesta de estos lotes a la recuperación hídrica de los últimos días.

En el extremo opuesto de la región, sobre el Oeste de Buenos Aires, se relevaron incrementos de superficie en áreas que durante la campaña pasada se encontraban anegadas. Similar es el caso para el centro de la misma provincia, en donde la recuperación de una importante cantidad de lotes anegados durante la campaña previa permitiría una mayor incorporación de girasol en este nuevo ciclo. Finalmente, sobre el núcleo girasolero del Sudeste de Buenos Aires, el relevamiento semanal continúa mostrando una leve caída interanual de superficie, en algunos casos amortiguada por un pequeño incremento sobre el área destinada a materiales de tipo alto oleico.

  • Trigo

Comenzó la cosecha de trigo 2013/14 al haberse recolectado cuadros aislados en el Centro-Norte de Santa Fe, puntualmente en inmediaciones a la localidad de Villa Ocampo. Producto de la severa sequía y del impacto de las bajas temperaturas en fechas tardías, los rendimientos obtenidos son muy heterogéneos (4 a 20 qq/Ha). No obstante, la superficie recolectada es insignificante, con lo cual habrá que esperar a que se generalice la cosecha para cuantificar en detalle el impacto negativo de las condiciones ambientales que atravesó el cultivo.

Regiones como el NOA y el NEA se encuentran a pocos días de iniciar las labores de recolección, ya que algunos cuadros se encuentran en grano duro, mientras que los más atrasados aún transitan floración, debido en gran medida al impacto de las bajas temperaturas que provocó un retraso en el desarrollo del cultivo. En ambas zonas se esperan rendimientos muy por debajo de los logrados las últimas campañas, y con un elevado porcentaje de área perdida, como resultado de la severa sequía que afectó a dichas regiones. El Centro-Norte de Córdoba es otra de las zonas en donde la falta de precipitaciones produjo un impacto negativo sobre el potencial de rinde a cosecha, con lo cual las productividades esperadas son de regulares a malas. No obstante, cabe destacar que estas cuatro regiones recién descriptas aportan solamente el 19 % de las 3.620.000 hectáreas implantadas con trigo a nivel nacional.

Hacia el sur del área agrícola nacional, zona núcleo triguera por excelencia y en donde se concentra más del 50 % de la superficie del cereal, el escenario es muy distinto. Esto se debe a que los cuadros de trigo se encuentran con buena disponibilidad hídrica desde el momento de la siembra; a la fecha se transitan plena encañazón en muy buenas condiciones. Sumado a esto, se relevó un óptimo estado sanitario en las regiones bajo análisis, y gracias a las buenas precipitaciones registradas se lograron realizar las tareas de re-fertilización, con el fin de mantener elevados los potenciales de rinde.

Sobre el centro del área agrícola nacional, algunas regiones como el oeste y norte de Buenos Aires lograron revertir el déficit hídrico gracias a precipitaciones que se acumularon durante las últimas semanas, y si bien el cultivo perdió potencial por la falta de agua en etapas iniciales y por el efecto de las bajas temperaturas, a cosecha se esperan rendimientos de regulares a buenos. Contrariamente, hacia el centro y sur de Santa Fe y parte del sur cordobés, el cultivo no logró revertir de forma efectiva el estrés hídrico que padeció durante la fase vegetativa, con lo cual la merma de rendimiento sería mayor.

Sobre este escenario, entendiendo que los núcleos trigueros evolucionan en muy buenas condiciones y que buena parte del centro del área agrícola nacional revirtió el estrés hídrico, mantenemos nuestra proyección de producción para la campaña en curso en 10.350.000 toneladas. De concretarse dicho volumen, estaríamos en presencia de un incremento interanual de 17,6 puntos porcentuales.

  • Cebada

Nuevas precipitaciones acumuladas durante los pasados quince días (entre 20 a 50 mm) sobre el centro, sur y este de la provincia de Buenos Aires, mantienen en muy buenas condiciones al cultivo de cebada. Cerca del 65 % de los cuadros de la región se encuentran en plena encañazón y un 20 % transita la fase de macollaje, mientras que el 15 % restante se encuentra espigando. Por otro lado, un gran porcentaje de los lotes fueron re-fertilizados con el objetivo de aumentar la potencialidad del cultivo, y además se están realizando aplicaciones preventivas con productos fungicidas.

Estas regiones en su conjunto nuclean más del 80 % de las 1.270.000 hectáreas implantadas en el territorio nacional, y de no contar con eventos climáticos adversos (como por ejemplo, heladas tardías) se esperan productividades de buenas a muy buenas para el sector sur del área agrícola nacional.

Otras zonas de importancia para este cultivo, como la región Núcleo Sur y el Norte de La Pampa-Oeste de Buenos Aires, transitaron las etapas iniciales con escasa oferta de humedad; no obstante, durante las últimas semanas acumularon lluvias que permitieron revertir el estrés hídrico que padecía el cultivo. Hoy por hoy se pueden ver cuadros en condiciones de regulares a buenas, y desde fin de macollaje hasta principios de espigazón.

Finalmente, hacia el norte en regiones como Núcleo Norte, Norte y Sur de Córdoba y Centro-Norte de Santa Fe, se aprecian cuadros muy heterogéneos y afectados por la falta de lluvias de buen milimetraje. Los cuadros evolucionan desde encañazón hasta plena espigazón, denotando mayormente un estado de cultivo de regular a malo.