Se realizó en Colonia San Adolfo, partido de Villarino, al sur de Buenos Aires, unas jornadas a campo organizadas por la Asociación de Productores Rurales de Villarino Sur (Aprovis), con el fin de afianzar algunos conceptos productivos relacionados a cultivos como el maíz y el girasol en esa región. Unos 50 participantes se dieron cita a lo que fue una jornada climáticamente perfecta.

La apertura de la jornada estuvo a cargo del Médico Veterinario, Dario Antonelli, quien se refirió a los resultados de la campaña actual de “picado” y sus avances en el grupo de coordinación, “uno de los aspectos a mejorar dentro de la producción de forraje para ensilado es lograr un aumento en la producción de materia verde por ha, puesto que bajo condiciones de riego, se esperaría una producción superior a las 38 tn MV por ha, que se viene promediando en los últimos años dentro del grupo coordinado por APROVIS”, destacó el coordinador.

Entre otros aspectos se vio que los parámetros de calidad, sin bien son mejorables, muestran un momento de picado bastante óptimo. “Como cambio en las fechas de siembra (muchos lotes de segunda) en la zonas importantes de picado, hoy tenemos la posibilidad de tener disponibilidad de equipos anticipadamente lo que mejoraría la productividad de los lotes y permitiría disponer de los lotes en forma anticipada”, agregó Antonelli. En base a eso, se propuso que aquellos productores que quieran anticipar las siembras lo hagan siendo la fecha de inicio propuesta el 20-10-13.

Al hablar del cultivo de maíz y sus particularidades, el Ing. Alberto Cragnaz apuntó al momento de la siembra, “la clave de un buen cultivo se desarrolla en el período previo a la implantación, pero la llave del buen cultivo está en el día en que se siembra. Los cultivos hacen uso de la energía que les llega a través de la radiación solar y tienen que tener una correcta distribución, tanto en el espacio como en el tiempo. Es decir, nacer uniformemente y a una distancia entre plantas que también sea uniforme, para permitirle capturar la radiación solar a todas las plantas por igual” resaltó.

A la hora de referirse a los productores en la zona de riego, Cragnaz fue contundente, “no hay eficiencia en el uso de agua sino no hay fertilidad, entonces, por más que estemos en un zona de riego, donde el agua no es el factor limitante, generalmente lo que se observa en cultivo de bajo riego es una muy importante deficiencia de fertilidad, con lo cual la eficiencia en el uso de agua cae”, destacó el profesional

Los auspiciantes de las jornadas fueron las empresas prestadoras del servicio de picado El Pasto, AICOR, Silajes Bordenave, y Estancia San Pedro.

Fueron interesantes los resultados de la encuesta realizada sobre la coordinación de picado en la zona, donde en general hubo coincidencia en la importancia de trabajar como grupo, puesto que permite mejorar la disponibilidad de equipos, picar en tiempo y forma, y generar un volumen de picado que permite tener un técnico para realizar la coordinación del picado. En general se calificó a los materiales obtenidos como buenos o muy buenos, y algunos de los aspectos criticados fueron la falta de oferta del servicio de crackeado y la poca relación en el costo del servicio con el precio vivo de la carne.