El debate por el impacto que tendrá el clima sobre la producción de soja y de maíz en los Estados Unidos sigue en el centro de la escena en el mercado de granos. Pasado mañana el USDA difundirá sus nuevos cálculos al respecto en su informe mensual de oferta y demanda de granos. Y como ocurre todos los meses en los días previos al reporte oficial, el los operadores privados aportan sus propias cifras.
Respecto de la cosecha 2013/2014 de soja estadounidense, el promedio de las estimaciones privadas la ubicaron en 85,46 millones de toneladas, a partir de un rinde de 27,71 quintales por hectárea. Las existencias finales de la campaña fueron estimadas en 4,49 millones de toneladas. Todos estos datos son inferiores a los proyectados por el USDA en agosto, de 88,60 millones; de 28,65 quintales, y de 5,99 millones, respectivamente.
Acerca del maíz, el mercado prevé la cosecha de los Estados Unidos en 345,96 millones de toneladas, producto de un rendimiento de 96,47 quintales por hectárea. El stock final, en tanto, fue calculado por los operadores en 43,99 millones de toneladas. Al igual que en el caso de la soja, las cifras previstas por los privadas son inferiores a las dadas por el USDA el mes pasado, de 349,60 millones de toneladas; de 96,91 quintales, y de 46,67 millones.
Si el USDA confirma en su trabajo las cifras proyectadas por los operadores, el efecto alcista sobre los precios favorecería particularmente a la soja, dado que las existencias finales de la nueva temporada quedarían por debajo de los 5,44 millones de toneladas, un nivel psicológico considerado bajo por los fondos especuladores.