El Banco Central de Brasil anunció un programa de intervención cambiaria que inyectará al menos 60.000 millones de dólares en el mercado de tipo de cambio hasta finales de año. Se trata de una audaz medida que apunta a apoyar a la moneda local en medio de su desplome hacia mínimos de cinco años.
"Con el objetivo de proveer hedge (protección) cambiaria a los agentes económicos y liquidez al mercado de cambio, el Banco Central de Brasil comunica que iniciará a partir de este viernes un programa de subastas de swap cambiario y de venta de dólares con compromiso de recompra", según una nota del ente emisor publicada en su sitio web.
El Banco Central afirma que el objetivo es dar "una cobertura cambiaria a los agentes económicos y liquidez al mercado de cambio". En efecto, si Brasil logra finalmente contener al dólar, habrá que observar cómo responde el gobierno argentino respecto a la política monetaria que lleva a cabo el BCRA actualmente en el mercado cambiario.
La desvalorización del real, de más de un 16% desde mayo, causó preocupación por su impacto sobre la inflación y el endeudamiento de las empresas locales.
El organismo dijo en un comunicado que ofrecerá, entre lunes y jueves, 500 millones de dólares en swaps cambiarios tradicionales, contratos derivados diseñados para apoyar al real y que equivalen a la venta de dólares a futuro.
Los viernes, ofrecerá 1.000 millones de dólares en el mercado a la vista a través de acuerdos de recompra.
Con la operación swap, el Banco Central ofrece dólares en el mercado de futuros, con el compromiso de recuperarlos en un plazo determinado, sea cual fuere el valor que tenga en ese momento.
Esto suele ser interpretado por el mercado como una apuesta a que el billete verde no seguirá subiendo, ya que el Central espera pagar menos reales cuando tenga que recomprar los dólares al vencimiento del contrato.
"Eso muestra la firme determinación de la autoridad monetaria de no dejar que el tipo de cambio salga de su lugar", dijo André Perfeito, economista jefe de Gradual Investimentos.
Esta semana, el real cayó por debajo del nivel de 2,45 unidades por dólar, su menor cotización desde el 9 de diciembre del 2008. Este jueves el real se apreció un 0,7% frente a la divisa estadounidense, que cerró la jornada negociada a 2,435 para la compra y 2,436 para la venta en el tipo de cambio comercial.
El Banco Central dijo además que, en caso de ser necesario, serán realizadas más subastas de lo originalmente previsto en estas operaciones. Desde enero a la fecha, las intervenciones del organismo suman 45.000 millones de dólares, según información actualizada de asesoría del banco.
"Si lo juzgara apropiado, el Banco Central realizará operaciones adicionales", dijo la autoridad monetaria en un comunicado.
La medida fue bien recibida por economistas del mercado financiero, que destacaron que el programa reducirá la volatilidad en el mercado, pero aseguraron que la tendencia es que el real se siga depreciando frente al dólar.
El real viene cayendo ante la expectativa de que la Reserva Federal de Estados Unidos reducirá en breve su programa de compras mensuales por 85.000 millones de dólares en bonos, que garantizaron una alta liquidez en los mercados internacionales.
Pese a que no es la única moneda en desvalorizarse contra el dólar, el real perdió más terreno que otras monedas de países con un perfil similar a Brasil.
La baja del real causó preocupaciones en relación a los efectos que pueda generar en la inflación, en un momento en que el Índice Nacional de Precios al Consumidor Amplio (IPCA) acumulado en 12 meses se aproxima al techo del rango objetivo de inflación del Gobierno del 6,5%.
Debido al alza de los precios en el mercado interno, el Banco Central inició en abril un nuevo ciclo de ajuste monetario, elevando la principal tasa de interés desde un 7,25% en ese momento hasta un 8,5%.
La próxima semana se reunirá el Comité de Política Monetaria y el mercado espera que la tasa referencial Selic suba hasta un 9% anual.
Respecto a la suba dólar frente al real en los últimos días, el ministro de Economía de Brasil, Guido Mantega, consideró que es "excesiva" y "pasajera".
"Esta suba excesiva es pasajera, no sabemos adónde irá el dólar, pero volverá a menores niveles luego de la turbulencia en Estados Unidos", explicó el ministro al canal Globonews.
Mantega atribuyó al movimiento de la Reserva Federal estadounidense, que dio señales de poder eliminar incentivos a la economía.
El presidente del estatal banco de fomento BNDES, Luciano Coutinho, dijo en un acto oficial que "una tasa de cambio sustentable" giraría en torno del 2,25 y 2,30 reales para el sector exportador sin que sea afectado por la inflación de la devaluación.
Por otra parte, la Bolsa de San Pablo cerró este jueves con ganancias del 1,97% y su índice Bovespa en 51.397 puntos impulsada por una fuerte alza de las acciones de las empresas petroleras.