Según el reporte de precampaña que emitió el pasado 14/8 la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, el área de siembra del maíz bajaría 3%, pero estimaciones privadas hablan de hasta un 10% menos respecto del ciclo productivo pasado.
Entre los elementos que deprimen el contexto de apuesta al cereal para este ciclo, se encuentra la baja del precio, la suba de costos y carga impositiva alta por las retenciones, al tiempo que si miramos el escenario externo, Estados Unidos, el principal productor maicero del mundo, obtendría una muy buena cosecha estimada en 349,6 millones de toneladas.
Las empresas de insumos no son desconocedoras de esta situación. En este contexto, Agrositio dialogó con Gonzalo Fernández Moreno, productor agropecuario y dueño de Ventué Insumos S.A., quien manifestó que la soja le lleva cierta ventaja al maíz en concepto de inversión inicial, ya que hacer una hectárea de la oleaginosa requiere de menos capital que lo que hay que desembolsar en tecnología para hacer una hectárea de maíz.
Sin embargo, remarcó la importancia de propender a la estabilidad agronómica mediante la rotación, aspecto clave de cuidado del suelo, y en su caso, expresó que el planteo productivo que sigue en su campo propio es el de la ecuación de porcentaje parejo para trigo, maíz y soja (es decir que dedica 33% de su tierra a la siembra de cada cultivo). Asimismo, agregó que a pesar del resultado adverso que algunas campañas dejaron en muchos productores, en su caso, gracias al planteo que decidió continuar, ha llegado a obtener muy buenos diferenciales de rendimiento.
Entrevista realizada a Gonzalo Fernández Moreno, de Ventuesa Insumos: