La semana pasada, un nutrido grupo de crianceros de unas 1200 vacas en las zonas de Treneta, Yaminué y Bajo Ramos Mexía, que se encuentran agrupados en la Unidad Territorial de Ramos Mexía, expusieron el difícil panorama a las autoridades del ente durante una reunión que se realizó en el municipio de la localidad sureña.
"Actualmente la situación está muy complicada. Hace unos meses venimos viendo que la cosa se agrava cada vez más porque en algunos campos empezó a escasear el agua, hay poca comida para los animales y encima en poco tiempo más las vacas van a empezar con la parición", señalaron.
Las lluvias de principios de año generaron esperanzas en el sector productivo de la Región Sur y todo hacía pensar que luego de más de siete años de intensa sequía la situación comenzaba a revertirse. Sin embargo, en el otoño y en lo que va del invierno el tiempo se ha presentado con pocas precipitaciones.
En la reunión, técnicos del ente informaron a los productores los trabajos que se vinieron realizando para lograr alguna ayuda de acuerdo al perfil de los campesinos y de las líneas de financiamiento. Algunos productores se encuadran en el Proderpa, otros tienen capacidad de endeudamiento y podrían acceder a créditos blandos, y a otro grupo se les busca una solución a través del programa bovino provincial. La presidente del Ente, Liliana Merelles, coincidió con los productores en la "compleja situación" y admitió que existe poco tiempo para actuar. En este sentido propuso aunar esfuerzos entre municipio, ente y productores para salir adelante.