La Secretaría de Agricultura de La Rioja dio a conocer ayer la implementación de una línea de créditos destinada a pequeñas y medianas empresas de los viñateros y olivicultores provinciales, que se obtendrán en el Banco de la Nación Argentina.
Para esto el Estado provincial puso unos $20 millones en plazo fijo para respaldar la operatoria.
La iniciativa surgió tras un acuerdo firmado entre el Gobierno provincial y el Banco de la Nación Argentina. Según la normativa del convenio, el mecanismo para acceder a la operatoria requiere condiciones financieras de riesgo 1 y 2. Estas condiciones implican que el productor sujeto de crédito puede "atender sus compromisos y tiene capacidad de pago alta" o que "puede atender sus compromisos, pero sus flujos de fondos tienden a deteriorarse".
Según publicó Ámbito Financiero, no entran en la operatoria los productores "con progresivo deterioro de sus ingresos y que tengan refinanciaciones reiteradas de capital, aun cuando estén pagando los intereses, ni los productores que se encuentren en situación aún más compleja".
El acuerdo contempla la denominada línea de créditos 400, y la Secretaría de Agricultura es el organismo encargado de determinar los certificados de elegibilidad. Los productores podrán acceder a éstas siempre y cuando cumplan con los requisitos para ello.
Soledad Vergara, integrante del equipo técnico de la Secretaría de Agricultura, explicó que los certificados de elegibilidad surgen tras "las gestiones del gobernador (Luis) Beder Herrera con el Banco Nación a los fines de poder llegar a un acuerdo mediante un convenio donde la provincia obtiene una línea de créditos para pequeñas y medianas empresas dedicadas al rubro olivícola y mejoramiento de vid".
