Un herbicida sistémico y selectivo en trigo para el control de avena fatua y raigrás, denominado Everest ® 70 WDG, fue presentado durante una reunión técnica organizada por Arysta LifeScience, en Mar del Plata.
El nuevo producto fue destacado por su excelente control de Avena fatua y Lolium multiflorum, además de transformarse en una nueva opción de rotación con un excelente graminicida, con efecto residual (“flush after flush”) de entre 10 y 21 días, además de ser amigable con el medio ambiente.
Everest ® 70 WDG es un producto Arysla LifeScience y será distribuido por InsuAgro.
También fue presentado el Pack Evito T como fungicida sistémico de amplio espectro.
Protección y nutrición
El brasileño Antonio Carlos Costa, director de marketing de Latinoamérica de Arysta, destacó que era un “día muy importante” por el lanzamiento en Argentina y adelantó la próxima presentación de otros seis productos.
Agregó que la empresa no sólo apunta a la protección de cultivo sino también a la nutrición, respondiendo a la nueva demanda mundial.
Arysta es la décima compañía más importante del mundo en el rubro y ocupa el octavo lugar en Brasil por ranking de ventas.
Costa recalcó la intención de invertir más en Argentina, donde llega con un portfolio que incluye productos propios y con patente, además de complementarse con alianzas.
Pronosticó que “Arysta va a ser una compañía muy diferenciada en los próximos años”.
Su compatriota Marcelo Gardel (gerente comercial) planteó una visión de Arysta y anunció importantes inversiones en el país, especialmente en incorporación de personal para la filial Argentina.
Destacó la presentación de “Evito T que es la mezcla de una estrobirulina de última generación y tebuconazole, en tanto que para trigo estamos colocando un fungicida muy importante que es el Everest, muy reconocido mundialmente, especialmente en Canadá y Estados Unidos”.
En materia de productos de nutrición, Gardel resaltó que permitirán mayor rentabilidad al agricultor, tanto por mayor calidad como producción.
“Arysta es una de las pocas empresas que tienen el mercado una línea de nutrición y otra de protección”, enfatizó
A su turno, el gerente comercial de Insuagro, Hermannd Welz, planteó el camino recorrido a lo largo de la década de existencia de su empresa, que apunta a ofrecer “la línea más completa de agroquímicos, priorizando la calidad de productos”.
En la Cima
Eduardo Hugo Maier, responsable en Argentina de Arysta, indicó que Everest ® 70 WDG (sulfonil-amino-carboril-traizolinona) se presenta en envase de medio kilo de capacidad, como se utiliza en casi todos los países.
Indicó que ello implica ventajas importantes como la falta de contacto del aplicador con el producto, sin posibilidad de salpicaduras ni necesidad de enjuagues, además de evitar la volatilidad para cultivos que puedan ser sensibles.
En materia de efectividad indicó que trabaja la primera vez y por siempre, controlando camadas de malezas, con un amplio espectro de control en gramíneas y hoja ancha.
En selectividad se destaca por ser seguro en todas las variedades de trigos primaverales y durum, entre 1 hoja a pleno macollaje (BBCH 11 a 29)
Si bien posee una amplia ventana de aplicación, la recomendación es hacer las aplicaciones en post emergencia temprana para aprovechar el efecto residual y el control de sucesivos nacimientos a baja dosis de uso con calidad de formulación y amplia compatiblidad en mezclas.
Entre las ventajas destacó el excelente control de malezas, el bajo manipuleo de producto, la exposición reducida y el ser amigable con el medio ambiente.
La formulación WDG lo hace fácil de manipular, con excelente solubilidad.
Su actividad residual de hasta tres semanas permite aplicaciones tempranas.
Nuevas estrategias
Ricardo Bardella, de Arysta LifeScience Argentina, dijo que Everest ® 70 WDG es un producto sobre el cual “hay una gran experiencia, especialmente en Canadá y Estados Unidos, Chile, Uruguay y Paraguay”.
“Si bien se recomienda su aplicación temprana, tiene una acción residual diferida, que controla el banco de semillas del suelo durante un periodo de dos a tres semanas, completando así la acción inicial y permite obtener un cultivo limpio a cosecha”, dijo.
Lograr un cultivo libre de competencia implica una perspectiva de máximo potencial de rendimiento, con mayor calidad comercial.
“Es un herbicida selectivo para el control de avena fatua y raygrass. También tiene una acción destacada en otras gramíneas que -si bien hay reportes limitados- se perfilan como nuevas malezas en la región”. indicó.
Se destaca además por el control de algunas malezas de hoja ancha como es el caso de poligonum. También tiene algún efecto de supresión sobre quinoa, yuyo colorado y otras malezas, complementados con un herbicida latifolicida.
En otro momento indicó que “es necesario agregar un coadyuvante, y desde Arysta recomendamos Companion, que es antievaporante de última generación, que combina ácidos grasos estratificados de soja y estelirizados con fosfóricos, lo que favorece la penetración y la translocación”.
Además, el producto permite ser aplicado aún con condiciones de rocío.
Pack Evito
En cuanto al pack Evito, fue definido por Bardella como un nuevo fungicida en el cual Arysta presenta una estrobirulina de última generación sumando a un triasol (tebuconazole) para el control de enfermedades de hoja y roya fundamentalmente, en el caso de trigo y cebada, con una acción destacada en otras enfermedades, como es el caso del microsporum.
Entre las características diferenciales se destaca el escaso efecto de las lluvias posteriores, dado que sólo son necesarios entre 15 y 20 minutos para la penetración y traslocación del producto.
“Tiene una acción destacada sobre la respiración de los hongos, al inhibir sus procesos respiratorios, lo que lo hace poco vulnerable a los procesos de quiebre y resistencia”, se indicó.
Complementado con diferentes triazoles, actualmente se evalúa no sólo en el cultivo de trigo y cebada, sino que está posicionándose la ampliación de etiqueta para soja, maíz, maní, papa y algunas especies frutales (vid y duraznero) y hortícolas.
En tanto, los bioestimulantes son la línea estrella de la empresa y apuntan “a una estructura de planta con un sistema radicular desarrollado que pueda competir frente a las condiciones de estrés, con mayor eficacia frente a la exploración del perfil del suelo y la extracción de los nutrientes, para sostener la floración y la fructificación, mejorando la calidad”.
Bardella indicó que la empresa recomienda aplicaciones tanto en cultivos extensivos como intensivos.
“La temporada anterior hemos visto un buen desarrollo y efecto sobre la rigidez de la caña y un mejor desarrollo del sistema radicular, que sumado a las condiciones de excesivas lluvias y sanitarias hizo que no haya quebrado espigas y que por lo tanto haya tenido menos pérdida y mejores rendimientos”, indicó para el cultivo de cebada.
Resistencia y tolerancia
Durante la presentación, diversos especialistas analizaron la problemática de la resistencia de malezas, incluyendo la visión de un referente chileno.
Al abordar la situación en el sur de Buenos Aires, el ingeniero Mario Vigna, del Inta Bordenave, indicó que la comparación entre trabajos realizados en la zona de Coronel Pringles en 2008 y 1981 determinaron la existencia de 22 especies de malezas no observadas antes.
El trabajo del Inta Bordenave ha relevado e identificado 105 especies durante en los cultivos de trigo del sudoeste.
Mencionó encuestas a los productores que determinan entre las principales preocupaciones a raygrass, crucíferas, conyza (rama negra), entre otras que comienzan a ser problema en la región.
Planteó claramente cuestiones de resistencia y tolerancia a herbicidas.
Tras un completo análisis, Vigna apeló a “diversificar alternativas y modo de acción de los herbicidas, así como momento de aplicación”.
Concluyó en que “los costos económicos y posiblemente ambientales aumentarán” y que “el enfoque del problema en su naturaleza, no solo desde la herramienta nos permitirá seguramente encontrar las alternativas integradoras y sustentables en el tiempo”.
“Un año interesante” prevé Jorge González Montaner
Durante las jornadas organizadas por Arysta, el especialista Jorge González Montaner analizó las perspectivas del cultivo de trigo y definió a la campaña como “un año bastante interesante, en el que se ve un movimiento significativo”, ya que “según las zonas hay una decisión más fuerte de siembra de trigo”.
Indicó que a nivel país se estimaba un incremento del diez por ciento de aumento de área de siembra, cifra que ya está siendo superada. “Las zonas en las que la gente eligió el trigo son aquellas en las que la cebada hizo un papelón el año pasado”, enfatizó.
Básicamente se trata de “aquellas regiones donde recién empezaron a hacer cebada. Uno puede observar el achique de superficie en Entre Ríos y al norte de Buenos Aires. En la zona Mar y Sierras, donde más se está volviendo a trigo son los sectores costeros, donde era más reciente la siembra de la cebada al igual que Tres Arroyos. En tanto la zona serrana en la que muestra más reticencia a retomar el cultivo del trigo. y eso tiene su razón es que la soja de segunda”.
Recordó que este año la soja de segunda tuvo un resultado “muy variado a raíz de una helada muy fuerte que ocurrió a mediados de marzo y afectó desde Tandil hasta Chillar, y todo el sudoeste”.
Por lo tanto, “en la zona serrana la cebada sigue peleando la muy fuerte y la pelea sigue dirimiéndose hasta el final”.
González Montaner acotó que “ahora entra el candeal, ya que hay una demanda muy importante de parte de los molinos, que hasta el año pasado no les importaba porque tenían la mercadería. Ahora están sin nada”.
Explicó que “por eso ofrecen precios relativamente tentadores, cambiando los destinos y tratando de pelear contra el trigo pan y la cebada en cada uno de los barrios. El candeal todavía se puede sembrar hasta mediados de agosto y por lo que hay chances de que se sigan cambiando las proporciones”.
No dejó de lado que “los números son muy finitos. El año pasado se pagaron alquileres de entre 350 y 400 en gran parte de la zona Mar y Sierras y hoy rondan los 300 dólares, con mucha variación en forma de pago y porcentajes. Se ha flexibilizado muchísimo”.
En cuanto a la faz técnica, destacó que “en esta campaña hay una falta de nitrógeno muy importante sobre todo en las zonas del oeste, mientras que en el sudeste es al revés”.
Planteó la disyuntiva entre apuntar a calidad o rendimiento, y mencionó las dificultades para conseguir semillas debido a que “el año pasado no hubo producción y la que hubo tuvo fusarium”.
“Cada uno tiene que hacer un análisis muy serio, según la ubicación más cerca de los puertos o de los molinos conviene ir hacia el grupo uno o dos de buena calidad”, sostuvo.
Calculó la prima por calidad cerca de los 30 dólares, “cuando lo histórico como ha sido de 8 a 10 y, para un molino, 20. Si obtienen quince o 20 por ciento más de rinde con trigos de alto potencial, en los lugares de cinco toneladas para arriba hay que ir a ese grupo de material. Cuando uno va a vender la calidad nunca sabe si lo prefieren o lo que falta”, razonó.