Invitada por Yara Argentina la Ing Anke Kwast de Hanninghof, Alemania, especialista en nutrición de cítricos, disertó en el último Congreso de Citricultura Iguazú 2013. Para mejorar la nutrición de las plantaciones se debe entender las necesidades del cultivo: requerimiento de nutrientes, importancia del momento de aplicación, efectos de cada uno, impacto del sistema de entrega de los mismos y las fuentes como se encuentran los nutrientes en el fertilizante. Además de ser “elementos esenciales”, los nutrientes tienen “efectos especiales” tanto sobre rendimiento como calidad.

El VII Congreso de Citricultura realizado en Puerto Iguazú ofreció capacitación y actualización técnica sobre temas que hoy son determinantes a la hora de producir fruta de calidad. La empresa Yara Argentina invitó a la Ing Anke Kwast, Senior Agronomist del Centro de Investigación Yara en Hanninghof, quien abordó la importancia de una nutrición balanceada para promover el rendimiento, calidad y también la sanidad y la tolerancia a estrés bióticos y a-bióticos en cítricos.
La nutrición balanceada es un requisito indispensable para obtener un cultivo fuerte. Si bien todos los nutrientes son importantes, en orden de magnitud en el consumo total por parte de la plantación, los más relevantes son: calcio, nitrógeno y potasio. En cuanto a la extracción, en orden de importancia se encuentran el potasio, luego el nitrógeno y finalmente el calcio.

En la sanidad y calidad

Además de ser “elementos esenciales”, los nutrientes tienen “efectos especiales”, con impacto en la sanidad y calidad, por lo tanto es importante que sean contemplados de forma integrada en el manejo del cultivo. Los mecanismos de defensa de las plantas se ven afectados por una pobre nutrición. Según Anke Kwast, “todos los nutrientes están involucrados en un sistema de alerta que activa los procesos de defensa involucrando a las síntesis de enzimas y fito-reguladores generando un impacto directo en la inhibición de la actividad de algunos patógenos. El nitrógeno promueve el crecimiento y la recuperación de la planta, participando directamente en la transmisión de la alerta mediante el óxido nítrico. Es esencial para las moléculas que participan en la defensa química (ej. citocininas, auxinas, glucanasas, quitinasas, fitoalexinas). La forma de nitrógeno afecta el pH del suelo y muchos hongos prefieren el pH bajo. Ante esto recomendamos usar nitrógeno como nitrato ya que evita la acidificación del suelo”. Para estos casos Yara recomienda el uso de Nitrodoble: nitrógeno de inmediata disponibilidad, que no acidifica el suelo y permite una mayor absorción de otros nutrientes como el calcio, el magnesio y el potasio.

“El calcio ayuda a fortalecer las paredes celulares y mejora la integridad de las membranas, lo que mejora la resistencia mecánica. Acelera la maduración de las hojas (las hojas firmes son menos atractivas a los insectos / vectores) y reduce la actividad de las enzimas producidas por los hongos o las bacterias. Además este nutriente une a las células como un pegamento. Sin el “pegamento de calcio”, las células quedan libres para separarse lo que puede generar trastornos fisiológicos, rajado de la fruta y mayor vulnerabilidad al ataque de enfermedades. El nitrato de calcio aplicado al suelo reduce la pérdida de árboles por fusarium frente a fuentes de nitrógeno convencionales”, sostuvo.

Estrategias para mitigar la acción de agentes bióticos y abióticos

La producción de cítricos puede ser afectada negativamente por la acción de agentes bióticos y abióticos (enfermedades, heladas, etc) . Las aplicaciones de nutrientes, junto a otras prácticas de manejo, ayudan a mitigar la severidad de estos agentes, aumentando y prolongando la producción de fruta. Las aplicaciones de nitrato de calcio al suelo, han demostrado efectos positivos sobre el aumento de la resistencia a estos agentes, debido a la acción del mismo sobre las paredes celulares.
En el caso de las heladas, bajas temperaturas pueden generar caída de frutas y quemado de las hojas. Los nutrientes juegan un papel fundamental para que el área foliar de los cítricos puedan resistir a heladas, por ejemplo aportando contenidos elevados de nitrógeno y potasio. El calcio juega también un rol importante ante estas condiciones ambientales porque mantiene la integridad de la membrana bajo estrés por frío, tal como se demostró en ensayos presentados sobre el cultivo de mandarinas. Como resultado del enfriamiento, la pérdida molecular se incrementa, particularmente el de iones de potasio e hidratos de carbono. Durante esta pérdida, el calcio de la membrana plasmática también es reemplazado. Esto lleva a un aumento de la permeabilidad de la membrana y la consecuente pérdida de solutos. El aumento de la concentración de calcio afuera de la célula reduce drásticamente el flujo de solutos y el daño por frío debido a su efecto de protección de la membrana.

Suelos: los cítricos son sensibles a la acidez

Para lograr un rendimiento sostenible hay que evitar el agotamiento de los nutrientes del suelo, la acidificación causada por las sucesivas cosechas y la aplicación de fuentes acidifcantes como la urea. Los cítricos son sensibles a la acidez del suelo, y en la actualidad gran parte de la citricultura argentina se cultiva en suelos levemente ácidos. Con la intensificación cada vez mayor de la producción de frutas, especialmente cuando se incorpora fertirriego, las condiciones del suelo están volviéndose cada vez más dinámicas.

Para mejorar los suelos los especialistas de Yara recomendaron el uso de nitratos en lugar de amonios, ya que éstos estimulan la absorción de cationes como potasio, calcio y magnesio. En ensayos presentados se demostró que los productos de la línea Yara Liva logran que el calcio esté rápidamente disponible, mejorando su concentración en suelo, sin limitar la absorción de potasio. Además Yara Liva aporta nitrógeno no acidificante. Por otra parte cuanto más elevada es la proporción de nitrato versus la de amonio en la solución de suelo, más alta es en la savia del tejido de la hoja, más alto es el rendimiento, y se genera una mayor sinergia entre el calcio y el boro lo que reduce la caída de la fruta luego de la floración. El boro contribuye a lograr raíces saludables, buena floración y fructificación, tejidos fuertes y elásticos y fruta de mejor calidad.

Integran la línea Yara Liva los productos: Calcinit - Nitrato de Calcio 100% soluble -, Tropicote: - nitrato de calcio para aplicación al suelo - y Nitrabor: nitrato de calcio con boro. Para el aporte de magnesio, azufre y potasio se recomendó el uso de la línea Krista productos que contienen estos nutrientes totalmente solubles. Los productos Yara se destacan por su la alta tecnología de fabricación y por la selección de materias primas. Con presencia en 120 países, Yara es líder en conocimiento global en nutrición de cultivos en todas las etapas de la producción de frutas y ofrece un completo portfolio de fertilizantes.