El secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, ratificó que el congelamiento de precios llegó para quedarse. El viernes aseguró que no hay día 61 en la medida que dispuso el Gobierno el 4 de febrero que en un principio duraría 60 días para artículos de primera necesidad. Si bien hace una semana el funcionario había deslizado que los controles podían continuar hasta octubre (mes en el que se llevarán a cabo las elecciones legislativas), el viernes pasado, sostuvo que se extenderán entre 8 y 10 semanas, es decir, hasta fines de mayo o principios de junio, de acuerdo con lo que indiquen sus sondeos.
Las afirmaciones sobre su plan las realizó en el marco de la reunión semanal de la cadena de la carne, denominada La escuelita, que Moreno realiza sistemáticamente desde hace años. No obstante, en esta oportunidad estuvo particularmente dirigida a los supermercados con mensajes para los bancos. Entre los presentes estuvieron Yolanda Durán, presidenta de Cedeapsa, una de las cámaras que reúne a los autoservicios chinos; Mario Ravetino, titular del Consorcio Exportador de Carnes (ABC); Rubén Manusovich, de Fedecámaras; Miguel Paulón, del Centro de la Industria Lechera (CIL); Juan Vasco Martínez, de la Asociación de Supermercados Unidos (ASU), que reúne a las grandes cadenas, como Carrefour, Walmart, Coto y Jumbo, e Ider Peretti, presidente del Consejo Argentino de Productores (CAP). Según trascendió, el secretario de Comercio también les aseguró a sus interlocutores que la salida de los controles será ordenada.
Frente a ellos, Moreno también insistió en la necesidad de que los bancos bajen las comisiones que cobran a los comercios por operaciones con tarjetas de crédito. De hecho, les dio tiempo hasta el jueves para que presenten un esquema en que que lleven del 3 al 1% el margen que les cobran a los comercios. Como contrapartida, ratificó que el Gobierno lanzará una tarjeta única si las entidades financieras no acercan una propuesta que colme las expectativas del Ejecutivo nacional (ver pág. 3 de F&M).
Moreno se expresó en estos términos después de que el Indec reportara que la inflación de febrero pasado había sido del 0,5%, contra 1,23% del Congreso.