Sobre gran parte de la Mesopotamia y el este de la región pampeana a pesar de la diversidad de milimetrajes, en general se observó un piso en los 30 milímetros.

Las lluvias se concentraron fundamentalmente cambiando del viernes para el sábado pasado. Importantes tormentas avanzaron en una línea desde el oeste y se fueron articulando sobre distintos sectores del este para generar los máximos que se observan en el mapa. El tránsito de las tormentas fue rápido y hubo franjas con menor oferta de agua como la que avanza desde el sur CB hacia el sur de ER. Luego del paso de las tormentas quedó como remanente una cobertura nubosa que mantuvo algunas lloviznas que incluso se observaron durante el transcurso del domingo. Tras el pasaje frontal se observó un cambio de ambiente que se tradujo en temperaturas otoñales, sin embargo las mismas se recuperaron rápido favorecidas por la recomposición de la circulación del norte. Esta misma circulación es la que está favoreciendo el acceso de aire húmedo perfilando una nueva situación concurrente al desarrollo de sistemas precipitantes. Los mismos comenzarían a desplegarse en el norte, pero durante el domingo con la llegada de un nuevo sistema frontal, es posible que gran parte de la zona núcleo logre recibir precipitaciones. En principio la oferta de agua presentaría un gradiente de norte a sur, es decir, las lluvias más abundantes serían más abundantes hacia el noreste de la región pampeana y el este del NEA. Se espera que las precipitaciones se desplieguen hacia el oeste, tomando también la provincia de CB, aunque no se espera que la oferta de agua este a la altura de la demanda en el sur y el oeste de esta provincia.

Las precipitaciones que aparecieron durante la segunda quincena de febrero y estas primeras precipitaciones de marzo, apuntalaron el final de campaña. Los primeros quince días del mes pasado exigieron los cultivares que habían cerrado el mes de enero al límite de las reservas. En consecuencia, es posible que respecto de las expectativas que se habían generado en diciembre, los rindes queden un poco por debajo, sin embargo todo indica que la cosecha alcanzará niveles de producción satisfactorios. Posiblemente el impacto negativo, relativo a su potencial de rendimiento, se sienta con mayor rigor en sectores de la zona núcleo, principalmente en el sur de CB y sudoeste de SF.

Las lluvias que pueden llegar entre sábado y domingo podrían continuar la mejora de reservas en la zona núcleo, aunque como se ha dicho, es posible que las precipitaciones sean más significativas en zonas que actualmente se encuentran más holgadas de reservas, es decir hacia el noreste de la región pampeana.

Promediando la próxima semana se perfila un enfriamiento que puede transformarse en riesgoso para el sur de la región pampeana. Las temperaturas mínimas podrían caer al intervalo de 0°C a 3°C entre jueves y viernes próximos, lo cual atenta directamente contra sojas sembradas sobre trigo o cebada hacia finales de diciembre o incluso principios de enero. Por el momento es una situación de alerta, pero el otoño viene dando muestras de adelantamiento en este sector de la región pampeana y por lo tanto no se descarta que se concreten algunas heladas tempranas. No serían muy intensas, pero igualmente tendrían capacidad de daño por el estadío del cultivo.

  • Por CCA - exclusivo Agrositio
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