Se descubrió, se descubrió.

.- Que se descubrió.

Obama es peronista, impuso que el salario mínimo por hora sea 9 dólares. En la actualidad no hay un salario mínimo, pero la referencia es de U$S 7,25.

.- Bueno, no es tan así, lo insinuó en un discurso. Dijo que ningún trabajador debería ganar menos de eso. Esto implica que U$S 9 por 44 horas semanales, son U$S 396, esto implica U$S 1.584 por mes.

Al dólar blue son $ 11.880 y al oficial $ 7.920

.- No son comparables, la mano de obra en Estados Unidos, con Argentina, en ambos países la inversión difiere, y en Argentina es mucho más baja. En Brasil el salario mínimo son U$S 300, en México U$S 150 y en Argentina el salario mínimo son $ 2.875 que representan U$S 575 en cotización oficial. Aunque los empleados de distintos sectores industriales o comerciales, no ganan menos de $ 5.000 en promedio, que representa U$S 1.000. Lo tomamos a valor oficial, porque las industrias, que exportan o importan, lo hacen a dicho tipo de cambio.

Estamos carísimos en dólares.

.- Correcto, en algún momento ajustaremos.

Volviendo a Estados Unidos, Obama y Peron un solo corazón.

.- Bueno, en su discurso del Estado de la Unión, que es el más importante del presidente americano en el año, también dijo que la economía marcha en forma positiva, gracias a empresas como Caterpillar, Ford y Apple. Por ende, nada tiene que ver con la frase peronista combatiendo al capital.

Pero se intereso y mucho por la clase media.

.- Correcto, también hablo de bajar el déficit con más impuestos, y menos baja de gasto público. En el mundo, todos se quieren salvar emitiendo.

Nos están copiando a nosotros, Obama nos está plagiando.

.- No es Obama, es el mundo en su conjunto, Europa y Japón están en déficit, no paran de emitir, las monedas se devalúan y se viene el súper dólar.

¿Eso nos complica?

.- Muchísimo, un súper dólar implica, baja de las materias primas y una tasa de interés en niveles más elevados. Estados Unidos esta saliendo de la crisis, el desempleo se ubica debajo del 8%, las propiedades aumentan de precios, el americano medio está volviendo a endeudarse, hay un clima de mayor prosperidad en Estados Unidos.

Como impacta en América Latina.

.- En nuestra región hay 3 modelos que están complicados, y cada uno ha tomado un atajo distinto.

Por ejemplo.

.- Un primer caso sería Venezuela. El país tiene déficit fiscal, esto implica que los ingresos se ubican por debajo de los egresos. Esto ha dado lugar a un enorme déficit fiscal que no encuentra financiación posible, ya que Venezuela recibe pocas inversiones y tiene una economía cerrada. Para ajustar la brecha procedió a una devaluación del signo monetario. Esto podría equilibrar momentáneamente el presupuesto, pero genera un efecto pobreza sobre la población y la da una gran incertidumbre a los probables futuros inversores.

Otro caso.

.- Brasil, tiene déficit fiscal, y lo financia con emisión de deuda pública. El mundo financia al país vecino y el ingreso de dólares revalúa al real, lo que trae como consecuencia una fuerte pérdida de competitividad, que por el momento se reemplaza o se atenúa con el mercado interno, pero a futuro le traerá problemas.

¿Por qué?

.- Brasil tiene un PBI de 2.500.000 millones de dólares y su deuda es de 2.000.000 millones de dólares, si hay una suba de tasas y bajan las materias primas, Brasil acrecentará su déficit fiscal Si le sumamos que los capitales podrían atenuar su ingreso, los problemas serán crecientes. No nos olvidemos que la tasa está subiendo a escala mundial.

Otro caso

.- Argentina, tiene déficit fiscal, y lo financia vía emisión monetaria. Esto nos ha generado una inflación muy alta en los últimos 5 años, lo que derivó en una pérdida de competitividad, caída de márgenes de rentabilidad y distorsión de precios relativos. La Argentina salió a flote por los enormes flujos de fondo que le aporto la soja, pero si en los años sucesivos las materias primas caen, habrá que buscar un sustituto que nos financie. Si no lo encontramos, allí comenzaran los problemas.

De los 3 casos, cual es el más manejable.

.- Ninguno, los países tienen que tener cuentas públicas equilibradas, de lo contrario comienzan a depender de variables que no manejan. Por ejemplo, Venezuela del precio del petróleo, Brasil de la tasa de interés, Argentina del valor de la soja.

Pero, Estados Unidos, Europa y Japón tienen déficit.

.- También están en problemas, cuando hay déficit las economías se complican y eso cuenta para un país desarrollado o un país no desarrollado.

En Argentina el blue se calmo.

.- Para nada, ayer termino en 7,45 para la compra y 7,65 para la venta. Sin embargo, si compras dólares por el mercado de títulos públicos, ya sea a través de Boden 2015 o el Bonar 2017, el precio de compra se ubica en 7,60. Esto implica que el mercado de bonos esta presagiando algo no positivo, como diría don Julio Cobos.

¿Por ejemplo?

.- Estamos en las puertas del fallo o postergación del fallo de la Cámara de Estados Unidos sobre los fondos buitres. Por otro lado, la soja no para de caer, toco 517 dólares, ojala se pare en los 500 dólares la tonelada. Siguen los rumores de un dólar turista.

Pero vos dijiste que eso se acomodaba en el fin de semana larga, le erraste.

.- Bueno, planteamos el rumor. Al gobierno dólares no le sobran, al que le sobran unos pesos, se compra un viaje al exterior o un auto importado. Esto esta impactando sobre las reservas, que ya se ubican muy cómodas por debajo de los 43.000 millones de dólares. Todos sabemos como actúa este gobierno, en algún momento interviene, y se terminaron los dólares baratos para viajar o comprar un auto cero kilometro, el que pueda que cierre ambos negocios lo antes posible.

Muy barato un auto importado.

.- Hay un chiquitito de 4 letras que vale $ 140.000 con motor 1.2. Si te llevas el motor grande con 7 marchas, vale $ 180.000. Me parece que en cualquier momento esto se termina, no sabemos cuando.

¿Estaría bien?

.- No lo sabemos. Creemos que muchas cosas están mal, pero lo que buscamos es tratar de alertar a la población de los negocios que hay que cerrar o no. De acuerdo al perfil de este gobierno, mi impresión es que esto termina con un dólar diferencial. Desde el punto de vista personal, no tendríamos que tener cepo y solo debería existir una sola cotización del dólar.

Hace tiempo que no me hablas de la construcción.

.- Como siempre, los departamentos que se venden en pesos, en pozo y aun precio que oscila entre $ 10.000 y $ 11.000 el metro, se venden como pan caliente. Más arriba de estos valores falta oxigeno, en cambio, en los valores mencionados hay demanda y negocios. Es el precio promedio de la construcción de los últimos 10 años.

Que me decís del campo.

.- No hay pronóstico posible. Hay campos con maíces espectaculares. En muchos lugares falta agua para la soja y el maíz tardío. Pero pronosticar, es una lotería. Nadie sembró en la misma fecha que un año atrás, por ende, hay muchas incógnitas a tener en cuenta. Mi percepción es que si se sembraron 19,5 millones de hectáreas de soja, a un rinde promedio de 25 quintales por hectárea, nos da una cosecha de 48,5 millones de toneladas, que es un 20% superior a la de un año atrás.

En el caso del maíz.

.- Si se cosechan 3,5 millones de hectáreas, con un rinde de 70 quintales, nos da un total de 24,5 millones de toneladas, que son 17% superiores a las de un año atrás.

¿Es realmente el número?

.- Son estimaciones, el numerito no lo tiene nadie. Pero es lo que más se comenta en el mercado.

Conclusiones.

.- El mundo es populista, y Obama es peronista. Todos muestran déficit, y así el sistema no funciona. Con un súper dólar por delante, tasas en ascenso y materias primas en descenso, América Latina tendrá problemas económicos. Argentina no es la excepción. Habrá que ver qué país está más inmunizado para el nuevo escenario económico internacional.

En él mientras tanto.

.- Hay muchos negocios, entre marzo y julio hay que cerrarlos, más adelante se puede complicar. Ahora hace foco en la etapa que se inicia, en donde los dólares de la cosecha y los mayores ingresos fiscales, te dan un veranito, a pesar de que el 21 de marzo comienza el otoño.

Por Salvador Di Stefano