En carnes los supermercados rompieron todas las marcas y facturaron al mes de noviembre 10.040 millones de pesos, un 16 por ciento más que lo facturado en igual lapso del año anterior.
Pero si se estiman las ventas de diciembre –un dato no revelado aún, pero que estacionalmente es la más alta del año- la facturación por carnes rondaría los 11.240 millones de pesos.
De este modo las cadenas del retail perforaron el techo de los 10 mil millones en ventas en un solo año, lo que implica una estampida en las ventas que marca una suba del 88 por ciento en los últimos tres años.
Si el caso de la carne sorprende, los lácteos no se quedan atrás. Mientras los tamberos reclaman a la industria un precio que no baje de los 2,20 pesos por litro de leche y la industria asegura que no puede pagar esos precios, los supermercados siguen facturando a dos manos.
Entre 2009 y 2012 las ventas de lácteos en los supermercados se duplicaron al pasar de 4.753 a 9.577 millones de pesos en tres años, medidos solamente los primeros once meses. Semejante crecimiento se explica por una suba promedio en ese periodo del 26 por ciento anual en las ventas.
En 2012 la facturación por lácteos creció un 25 por ciento respecto de 2011, cuando ya se había batido un récord por ventas anuales en torno a los 8.500 millones de pesos.
Así si se proyectan las ventas de diciembre –sin datos oficiales todavía- la facturación por lácteos en los supermercados rondaría los 10.500 millones de pesos, unos 2.000 millones más que en 2011.
Paralelamente la producción de leche a nivel nacional, continúa en un volumen estable en torno a los 11.600 millones de litros. En tanto las exportaciones se retraen ya sea por menores volúmenes vendidos al exterior como por caída en los precios internacionales en función de la crisis internacional.