Siempre hay ganadores. Y por lo tanto también siempre hay perdedores. 2012 fue un año de mucha efervecencia política y los resultados están a la vista.
El Gobierno se llevó la peor parte con un alejamiento respecto a distintos estratos de la sociedad. Pero también hubo ganadores que lograron sumar, posicionarse, y hasta conseguir cierta consideración que antes no tenían.
Aquí un repaso:
Cristina Fernández - Perdedor
La Presidente licuó gran parte de su popularidad en tan sólo un año de gestión. El 1ro de su 2do mandato. Y a menos que se esté hablando de encuestas ultraoficialistas (las de Artemio López, el más claro ejemplo) no hay sondeo que no muestre una abrupta caída de la imagen positiva de la mandataria, al mismo tiempo en los niveles de desaprobación suben por el ascensor. Errores de gestión, las sospechas de corrupción de su gobierno y otros sucesos, como la tragedia de Once, generaron el clima adverso que tuvo su punto más alto con las manifestaciones contestatarias del 13S y del #8N. En 2013 la Presidente tiene el desafío de reconstruir relación con diversos sectores de la sociedad, principalmente de la clase media. Es un año electoral en el que los errores se pagarán caros, sobre todo si el objetivo es el de la reforma constitucional que habilite la re-reelección.
Daniel Scioli- Ganador
Ya venía cosechando la antipatía del cristinismo más duro, a pesar de haber acompañado aNéstor Kirchner desde la hora 0. Y la bomba estalló cuando el gobernador bonaerense hizo públicas sus aspiraciones, condicionadas, a la Presidencia de la Nación. Pero Scioli logró, no sin dificultades, sobreponerse a la adversidad marca K, con un vice opositor, al que pudo doblegar, la resistencia del Ejecutivo Nacional a bridarle asistencia financiera en un momento de vacas flacas, y a las críticas que lo tildaban de "poco eficiente" a la hora de gestionar. Scioli concluye un año en el que su imagen ganó unos puntos, perdió otros, pero no es frágil, ni mucho menos.
Amado Boudou - Perdedor
Seguramente es el gran perdedor del año. El vicepresidente prometía ser la figura descollante del cristinismo, quien pudiera convertirse en el delfín de Cristina Fernández en 2015. Pero quedómuy debilitado por una causa judicial (el affaire Ciccone) y logró que "la corrupción" irrumpiera de forma inesperada en las preocupaciones que se destacan en las encuestas. Boudou continúa imputado a pesar de que contó con el apoyo de la corporación política para manterlo a salvo. Corrió a un juez, a un fiscal, y hasta al Procurador general de la Nación. Todo en vano. Su situación judicial dista de ser la mejor, sobre todo después, a pesar de sus expectativas, de que la Cámara confirmara las pruebas que hay en su contra. Cadaver político. Algunos ya se refieren así al vicepresidente.
Grupo Clarín - Ganador
Aunque batalla día a día para no perder credibilidad contra el enorme, pero poco eficiente, maquinaria propragandística del Gobierno, el holding dirigido por Héctor Magnetto al menos puede celebrar a fines de 2012 que se mantiene suspendida para el mismo la aplicación plena de la Ley de Medios. Un oportuno fallo de la Cámara Civil y Comercial que prorrogó la medida cautelar que lo beneficia, le permitió a Clarín aguarle la fiesta del 7D al cristinismo. La Corte confirmó esa sentencia y además rechazó estudiar anticipadamente la constitucionalidad de los artículos impugnados, como lo pretendía el Ejecutivo a través del per saltum. Algunos estiman que esa misma Cámara se pronunciará contra la constitucionalidad, como ocurrió en 1ra instancia, por lo que todas las miradas apuntan contra el máximo tribunal. Un final abierto.
La CGT Balcarce - Perdedor
La central sindical más afín a la Casa Rosada, de ahí el mal intencionado apodo, tuvo varios problemas en sus inicios. Tardó en definirse el frente antimoyanista, y luego navegó la aguas de la incertidumbre a la hora de definir a su líder. Finalmente el metalúrgico Antonio Caló es quien encabeza este conglomerado que reúne a independientes y a los Gordos que tan buenas migas lograron hacer con el menemismo en los 90. Toda una contradicción del cristinismo que le dejó el sello legal de la CGT a este grupo. Y aunque logró consolidarse, nunca quedaron del todo claro las diferencias con el moyanismo, y para colmo el hecho de ser oficialista no le garantizó al flamante bloque conseguir que la Presidente diera solución a sus reclamos (nada pasó este año con el mínimo no imponible del impuesto a las Ganancias). Seguramente esperan que 2013 sea un mejor año.
Hugo Moyano - Ganador
El camionero logró consolidarse como el opositor más claro del Gobierno, a pesar de haber sido su aliado durante la mayor parte de los 9 años del kirchnercristinismo. Y aunque esto no le reditúa ni una mejor imagen ni caudal electoral, Moyano puede jactarse de ser una de las principales preocupaciones del Ejecutivo Nacional. Hizo un paro que generó desabastecimiento y logró evitar a la Justicia que el cristinismo le tira encima. Además se reconcilió con el gastronómico Luis Barrionuevo. Y la unión con el CTA Pablo Miceli generó el 1er paro general de la era K. Hasta dónde llegará esta alianza, nadie lo sabe. Pero todos estarán muy atentos a los movimientos políticos del líder de la CGT Azopardo este 2013, en el que ya llamó a votar en contra del Gobierno.
Gabriel Mariotto - Perdedor
Es la contracara de Daniel Scioli en la provincia de Buenos Aires, aunque es su vice. Urgente24 ya habló sobre su situación en el año que termina.
José Manuel de la Sota - Ganador
El gobernador cordobés logró este año colocarse en el mapa político como uno de loscandidatos peronistas en carrera a 2015. No es poco. El Gallego para eso tuvo que mostrarseconfrontativo con el Gobierno Nacional al que intentó correr por la vía judicial en reclamo de una deuda que mantiene la Anses con su provincia. No consiguió mucho en ese sentido, pero logró meterse en la agenda política, imprescindible para la construcción de liderazgo. Claro que todavía le falta para que su influencia supere los límites de Córdoba.
La Cámpora - Perdedor
Si bien la agrupación ultracristinista cada día tiene mayor injerencia en los espacios de poder dentro de la gestión pública, su incapacidad de tomar la calle, lo que el Gobierno más necesita de una organización como esa, quedó expuesta, por lo que se vio reducida a una pieza más del colectivo militante Unidos y Organizados que garantiza mayor extensión en materia de ocupación de espacios públicos, una materia que La Cámpora, claramente, reprobó este año.
Sergio Massa - Ganador
La popularidad del intendente de Tigre sigue en ascenso. Y ya se habla de él como un factor determinante en las elecciones de medio término que se juegan en este 2013. Si jugará a favor o en contra del Gobierno es el misterio por el que se desviven los analistas políticos (y en la misma Casa Rosada). Mientras, Massa sigue manteniendose fuera de la pulseada y prefiere mostrar gestión. Le ha ido muy bien en ese camino.
Julio De Vido - Perdedor
Aunque en el último tramo del año el ministro de Planificación, un histórico de la década K, ha recuperado algo de protagonismo, lo cierto que el balance arroja más oscuros que claros. Perdió influencia en la gestión energética y del transporte. Frente a Axel Kicillof (sin embargo, otro perdedor), en lo 1ro, y frente a Florencio Randazzo (otro ganador) en el 2do. Se especuló con su renuncia, sin embargo, allí sigue. 2013 puede ser su año, o, más bien, todo lo contrario.
Mauricio Macri - Ganador
El jefe de Gobierno porteño pudo hacer que su situación judicial no fuera un tema. Nadie habló este año del escándalo de las escuchas. Por otro lado, salió bastante bien parado en la pulseada del subte, aceptando el traspaso, pero resistiendo los embates del Gobierno. El aumento de los impuestos le generó un fin de año complicado y sigue pendiente su armado a nivel nacional. Pero los efectos de esos temas se verán con mayor claridad en 2013.
La oposición - Perdedor
En general, la oposición dejó pasar otro año sin poder enviar a la sociedad una señal clara de una alternativa al cristinismo. La UCR sigue surcando las aguas de sus propias internas, el peronismo disidente amaga con rompimientos y Elisa Carrió no logró recuperar ni siquiera parte de su capital político. Hermes Binner y el FAP continúa su camino de consolidación, pero aún está verde como opción. Ningún espacio no cristinista, además, no pudo capitalizar el descontentocon el Gobierno que se manifestó en los cacerolazos y las marchas.
Ricardo Lorenzetti - Ganador
En la última parte del año, el cristinismo acosó al presidente de la Corte Suprema para que develara sus aspiraciones políticas, en una forma de presionarlo para que resolviera los temas pendientes de la Ley de Medios en la Justicia. Lorenzetti no se prestó al juego: negó la existencia de tales aspiraciones y no falló de acuerdo a esas presiones.
La sociedad que se manifiesta - Ganador
Las manifestaciones del 13-S y del #8N mostraron que no está todo perdido y que la conciencia ciudadana aún tiene fuerza para salir a la calle protestar por lo que no le gusta. En todo el país se le reclamó al Gobierno por mayor seguridad, menos inflación, menos presiones a la justicia y a los medios independientes. Una fiesta de la democracia, a pesar de las acusaciones de golpismo, algo que el cristinismo ve en todos lados.
