La situación fue complicada, sobretodo en la última semana del mes de agosto. La zona sur de la provincia de Buenos Aires sufrió una importante crecida del agua que generó problemas para los partidos de la región.
Por las intensas lluvias acontecidas durante el mes de agosto (para los especialistas, el octavo mes de este año superó con creces los registros de los últimos 30), no solo el oeste bonaerense tuvo sus dificultades.
El sudeste, una importante zona ganadera y agrícola del país, también se vio afectado. Las inundaciones también fueron noticia en dicha región.
De hecho, las vicisitudes obligaron a los funcionarios provinciales a tomar cartas en el asunto y relevar la zona. El ministro de Asuntos Agrarios, Gustavo Arrieta, sobrevoló algunas horas la zona el pasado martes 28 de agosto.
Hoy, la situación ha mejorado. Los daños han sido importantes y han dejado una importante estela que llevará seguramente bastante tiempo recomponer. Pero las aguas han bajado. Aun quedan algunos caminos con complicaciones y varios campos con agua, pero la mayor parte de la zona ha visto una disminución sustancial; lo que permitirá en los próximos días analizar con mayor exactitud las secuelas; conocer en profundidad las posibilidades de los lotes que tenían fina y programar para las próximas semanas intenciones de siembra gruesa.