La conferencia se desarrolló en el predio ferial de Palermo y asistieron alrededor de 600 representantes de más de 50 países, incluyendo expertos de alto nivel comprometidos con la labor de la Comisión del Codex Alimentarius, la organización normativa para la inocuidad de los alimentos reconocida por la Organización Mundial del Comercio.
En el encuentro, que fue convocado por la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE), también hablaron el presidente de esa entidad, Barry ONeil; el director general del organismo, Bernard Vallat; Michel Scannell, de la DG-Sanco de la Unión Europea y Lourens Bosman, presidente del Grupo Carne y Alimentos para el Ganado de la Federación Internacional de Productores Agropecuarios (FIPA).

Al dar la bienvenida en nombre del Gobierno, Amaya agradeció a la OIE por elegir al país para realizar la conferencia y destacó que «lo que más nos interesa es ver cómo unimos lo que se defina en esta reunión con la realidad de todos los días».
Sostuvo que «hay dos grandes factores que debemos considerar en lo que se decida en esta reunión: el fenómeno financiero y el cambio climático» y agregó que «hasta hace poco a lo que sucedida en el Norte se lo llamaba falta de controles y a lo que sucedía en el Sur, corrupción. La crisis financiera mundial nos ha demostrado que todos estamos en el mismo barco y debemos ponernos de acuerdo porque ambos temas nos plantean que nos salvamos todos o ninguno», señaló.

En lo que respecta al cuidado del ambiente, Amaya recordó que «hay algunos trabajos recientes que atribuyen al ganado bovino ser un factor de contaminación ambiental. La OIE y la FAO están discutiendo esto y tenemos que tenerlo muy en claro para ver qué es lo que vamos a hacer en tal sentido».

En tanto ONeil subrayó que la OIE «ha alentado la estandarización del sistema de identificación y trazabilidad de los animales» y agregó que su implementación «requiere planificación y apoyo», al tiempo que confió que la reunión «nos permita ver dónde la OIE debe repasar lo que está haciendo».

A su turno, Scannell indicó que «la Argentina es un país que ha demostrado que se toma a la agricultura muy en serio» y afirmó que «ahora es el momento en que la OIE tiene que avanzar en el tema de trazabilidad en todo el mundo».

Por último, Bosman, dijo que «los sistemas de identificación y trazabilidad son elementos muy importantes y proveen beneficios directos e indirectos a productores y consumidores».

Fuente: Ambito Financiero.