Por José Crettaz
De la Redacción de LA NACION
En los últimos diez días, el campo puso en marcha una avanzada legislativa que va dando resultados mucho antes de lo previsto. Arrancó el jueves 24 del mes pasado, cuando el diputado justicialista Felipe Solá se reunió con la Comisión de Enlace en Palermo al terminar la primera jornada de la 122a. Exposición Rural.
En ese encuentro, el legislador habría transmitido el interés del grupo de legisladores peronistas que lo acompañaron en el rechazo de la resolución 125 en la Cámara de Diputados en avanzar en el tratamiento de un nuevo sistema de retenciones en la línea del dictamen de minoría que propuso su sector: segmentación de retenciones para que los productores más pequeños paguen menos e incentivos para el uso de fertilizantes y la compra de maquinaria agrícola.
Pero la cosa no queda sólo en las buenas intenciones de Solá. Las cuatro entidades agropecuarias también tendrían el acompañamiento de los diputados y senadores que responden al gobernador de Córdoba, Juan Schiaretti, que hoy estará en el acto inaugural de la muestra.
Otro legislador justicialista muy activo estos días en este tema es el senador santafecino Carlos Reutemann, que se reunió con autoridades de las bolsas de Cereales de Buenos Aires y de Comercio de Rosario, donde funcionan los principales mercados de granos del país. Y los diputados del radicalismo K también siguen trabajando en materia de retenciones. En el agro ven a Solá y Reutemann como posibles referentes de la iniciativa.
Varios intereses confluyen en este armado. El campo no quiere esperar a que el gobierno de Cristina Kirchner insista, como indicaron algunas versiones esta semana, en un nuevo esquema de retenciones. Además, a pesar de que las retenciones volvieron a los niveles de marzo pasado, los pequeños y medianos productores siguen sin la segmentación que reclaman las entidades agropecuarias, especialmente la Federación Agraria. Y las provincias, necesitadas de recursos, quieren que lo recaudado por retenciones sea coparticipable, por eso buscan que al menos parte de la alícuota se pague a cuenta del impuesto a las ganancias, punto en el que estaría de acuerdo el líder ruralista entrerriano Alfredo De Angeli.
"Por medio de algunos legisladores de las provincias de Córdoba y de Buenos Aires surgió la posibilidad de avanzar en el tema de retenciones. Habría más de 30 diputados oficialistas, entre justicialistas y radicales k, que apoyarían los cambios y permitirían avanzar si se cuentan los votos de la oposición", dijo una fuente ruralista que participa de las conversaciones.
En líneas generales, las alternativas son varias. Algunas contemplan retenciones del 30 por ciento para la soja y del 20 para los cereales, con segmentación para que los productores más grandes paguen más, tal vez a cuenta del impuesto a las ganancias. Los ruralistas insisten en que una tasa superior al 33% es confiscatoria y, por lo tanto, inconstitucional, y por eso buscarán bajar la retención a la oleaginosa.
Es que el campo se prepara para avanzar en la búsqueda de soluciones aun si el Gobierno no convoca al diálogo a las cuatro entidades que lideraron una protesta histórica que quedó en suspenso cuando la presidenta Cristina Kirchner "limitó" por decreto el alcance de la resolución 125. La agenda del sector es amplia y conocida: segmentación de retenciones, flexibilización de exportaciones, e incentivos para la ganadería y la lechería encabezan ese listado.
"La idea concreta es tomar alguno de los proyectos conocidos, hacerle correcciones y consensuarlo con todos los sectores parlamentarios y cuando haya una coincidencia sólida ponerlo a consideración de la cámara", agregó la fuente del campo, que evitó hablar de plazos.
En el agro hay diferencias sobre la conveniencia de avanzar en este sentido cuando el Gobierno aún no terminó de asimilar la derrota de su proyecto en el Senado. "No hay cabida política para que aumenten las retenciones y no tiene sentido que el campo sea el que avance con el tema", dijo otro ruralista. Igual, por ahora mucho no se puede hacer: hasta el viernes próximo el Congreso seguirá de receso invernal.