Durante las cinco últimas jornadas, las bajas llenaron de escepticismo el mercado de Chicago.

Pero, este miércoles la suerte cambió.

El precio de la soja tuvo un repunte parcial de orden técnico, en un mercado con síntomas de sobreventa.

Pese a la mejora, el panorama no luce consistente con nuevas y sostenidas alzas.

La incertidumbre en el mundo rige como una constante.

El presidente Trump está adoptando una estrategia claramente mercantilista, donde el proteccionismo ocupa un lugar central, con un visible sesgo antiliberal.

El mercantilismo de Trump es manifiesto.

La regresión hacia el mercantilismo

El mercantilismo entiende, en líneas generales, que las exportaciones son buenas y las importaciones son malas.

La visión de Trump es notablemente maniquea.

El presidente parece creer que los países que tienen un superávit comercial bilateral de bienes con EE.UU. están robando al pueblo estadounidense, en tanto que aquellos que tienen un déficit son países “buenos” con el pueblo de este país. Por lo tanto, con ellos se debe dialogar.

No resulta erróneo afirmar que la visión de Trump sobre el comercio internacional asemeja a una pugna entre países, en la que el "vencedor" es el que exporta más y, a su vez, importa menos.

La cuestión es que la guerra arancelaria ya estalló.

Y así ha dejado de ser una simple amenaza: se cumple como un hecho que afecta el comercio global.

A ello, se agrega el cambio de estrategia estadounidense respecto a la guerra entre Rusia y Ucrania, que abre muchas más incógnitas para la globalización y para el crecimiento global.

Este es un punto que seguramente repercutirá en el crecimiento mundial, por lo que es posible que haya algún grado de estancamiento.

Las medidas de Trump son un duro golpe dada la ampliación hasta el 20% de los aranceles contra las importaciones chinas y de la entrada en vigor de los aranceles del 25% contra los bienes de México y de Canadá.

Así el nuevo cuadro, las represalias no se hicieron aguardar. China confirmó que desde el 10 de actual pasará a cobrar un arancel del 10% a la soja de EE.UU.

Duro golpe al comercio

En principio, es algo malo para todos los países proveedores de materias primas particularmente los granos.

Obviamente, no todo es negativo.

¿Por qué? Pues porque para América del Sur, especialmente para Brasil, Paraguay y Argentina, esta nueva situación representa la posibilidad de ganar mercados nuevos.

Por una cuestión estacional, EE. UU. no acusará el golpe de China ya que en esta época del año suele abastecerse de América del Sur.

Vemos… En esta época del año, China prácticamente deja de comprar soja estadounidense, para dirigirse fundamentalmente a Brasil, dado que EE.UU. ya ha vendido cerca del 90% de su saldo exportable de soja.

Pero cuando llegue el período de oferta, grande será el riesgo de continuar reduciendo la participación estadounidense en el abastecimiento de China, en vista de la gran producción de nuestro vecino.

En tanto, en la Argentina, la situación es delicada pues la soja es menos competitiva en razón los derechos de exportación. Una lástima.