
La campaña agrícola 2024/2025 en la región de la Bolsa de Cereales de Bahía Blanca (BCP) presenta una mezcla de desafíos climáticos y estrategias de adaptación. A pesar de las altas temperaturas y la falta de precipitaciones, el maíz sigue mostrando su resiliencia en diversas zonas, mientras que otros cultivos enfrentan retos importantes.
La siembra de maíz en el área de influencia de la BCP concluyó con una superficie sembrada de 1.61 millones de hectáreas, manteniéndose estable respecto a la campaña anterior. Este logro se atribuye a la adaptabilidad del cultivo en distintos ambientes productivos de la región, a pesar de las condiciones climáticas adversas.
En la zona norte, se sembraron 693,000 hectáreas, distribuidas en un 30% de maíces tempranos y un 70% tardíos. En contraste, en el noreste bonaerense, esta proporción se invierte. La zona centro alcanzó 762,000 hectáreas, con una proporción similar de 20% para siembras tempranas y 80% para tardías, impulsadas por condiciones más favorables para su desarrollo.
La zona sur reportó una leve disminución del 1% interanual en la superficie sembrada, con 158,000 hectáreas. Aquí predominan las siembras tardías, una estrategia adecuada dada la baja disponibilidad hídrica en esta región.
Condición del Cultivo
En general, el maíz se encuentra en una condición de regular a buena en las provincias de Buenos Aires y La Pampa. Los cultivos tempranos están en fases reproductivas, como la aparición de estigmas (R1) y el grano lechoso (R3), aunque algunas zonas, como Trenque Lauquen, se vieron gravemente afectadas por la sequía, obligando al uso forrajero.
Los planteos tardíos en la zona centro presentan variaciones desde las etapas V4 hasta V14. Sin embargo, la falta de agua ha detenido el crecimiento en algunas áreas y se han detectado casos de roya, afectando aún más el rendimiento potencial del cultivo.
Impacto Climático y Reserva Hídrica
Las precipitaciones durante enero promediaron solo 21 mm, un 68% por debajo de la media de los últimos 9 años. Esto ha generado un déficit hídrico significativo en gran parte de la región, con el centro-norte bonaerense siendo una de las áreas más afectadas.
La campaña de maíz 2024/2025 destaca por su capacidad de adaptación en medio de un escenario climático complejo. Mientras que algunas zonas enfrentan pérdidas debido al estrés hídrico y térmico, la implementación de estrategias como el predominio de siembras tardías y el monitoreo de plagas podría mitigar el impacto en los rendimientos.
Fuente: Informe de la Bolsa de Cereales de Bahía Blanca, enero 2025.