Los drones son un fenómeno de crecimiento comercial en el mundo y el mercado argentino no es la excepción.
El uso de un drone para pulverizar ya no forma parte de las curiosidades y se está volviendo común, incluso en cultivos tradicionales.
Es más, empresas que tiene el corazón de su negocio en las pulverizadoras, también están comercializando drones.
¿Estamos ante rivales que pelearán por el mismo lugar en las estrategias de combate contra las malezas o, en realidad, forman un dúo para soluciones integradas?
Discusión
La función inicial que se les asigna a los drones es llegar a zonas de los cultivos que no conviene tratar con las pulverizadoras convencionales.
En otras palabras, resultan ideales a la hora de hacer manchoneos, sin pisar las plantas ni provocar pérdidas.
Sin embargo, desde las empresas que comercializan drones sostienen que, si bien es correcto atribuirles la ventaja del manchoneo, los drones están para tareas más amplias.
Incluso, se mencionan casos de equipos que han hecho aplicaciones en soja y maíz, sobre superficies considerables.
Pero se pude aducir que no son comparables las performances ni las capacidades de un drone y de una pulverizadora.
En Estados Unidos, se hicieron ensayos para comprobar que se necesitan 33 horas para cubrir 400 hectáreas con un drone, frente a las 12 horas que se requieren con una pulverizadora autopropulsada.
Costos
Otro argumento utilizado en favor de los drones es que su precio es notoriamente inferior al que se debe abonar en la incorporación de una pulverizadora.
Pero, de acuerdo con la superficie que se deba tratar (y si esta es extensa), ¿alcanzará con un solo drone?
Además, si es necesario contratar a una persona capacitada en el vuelo de drones, hay un costo adicional que debe ser considerado.
Evaluación
De todos modos, y en cada caso en particular, se debe analizar si el costo inicial del drone es representativo de los costos totales a largo plazo.
También debería evaluarse la eventualidad de recurrir a los servicios de empresas que actúan como contratistas con sus drones para hacer pulverizaciones.
La cuestión todavía tiene una buena distancia para recorrer antes de dejar en claro si hoy existen dos tecnologías competidoras en pulverización o si están llamadas a jugar juntas.
Fuente: MaquiNAC