El ganado con destino a faena cerró otra semana de firmeza en los valores, con industrias dispuestas a pagar hasta US$ 4,15 por kilo de novillos especiales y pesados, con carcasas de más de 280 kilos.
Si bien hay cierta distorsión en el mercado por el conflicto que mantiene la gremial de trabajadores de la industria frigorífica (FOICA) y la posibilidad de paros sorpresivos, la oferta de ganado terminado sigue siendo relativamente escasa, lo que mantiene la firmeza de los valores, con precios que se ubican un escalón por encima de la semana anterior.
Para los novillos gordos buenos los precios se ubican entre US$ 4,00 y US$ 4,05 por kilo, en tanto que las vacas pesadas llegan a US$ 3,90 y las vaquillonas, con buena demanda desde el abasto, se pagan a US$ 3,95-4,00.
Las entradas a las plantas van desde una semana hasta dos semanas en algunos casos puntuales.
Las lluvias caídas en prácticamente todo el país durante la última semana mejoraron notoriamente el estado de las pasturas y consolidan la expectativa de una buena entrada al verano desde el punto de vista forrajero. Esto, además, de la mejora en los precios del gordo, ejerce presión al alza sobre los precios de la reposición, como quedó demostrado en los remates de Plaza Rural y de Pantalla Uruguay de la última semana, con subas en los precios medios de todas las categorías. Como ejemplo, el precio medio de los terneros aumentó 4 centavos respecto al remate de principios de noviembre a US$ 2,63 el kilo.
La expectativa es que, contrariamente a lo que es usual en estos momentos del año, cuando aumenta la oferta, el mercado del ganado a faena siga firme, con una demanda que mantiene el interés comprador y que supera a una oferta que, a pesar del momento del año, no es lo suficientemente elevada como para equilibrar el mercado.
A su vez, el mercado de la reposición también se mantendrá firme, sostenido por la buena base forrajera, la demanda desde los corrales de engorde y la exportación en pie.