México se fijó el objetivo de sentarse a la mesa de negociación con la administración del presidente Donald Trump sin pendientes con Estados Unidos, expresó Luis Rosendo Gutiérrez, subsecretario de Comercio Exterior de la Secretaría de Economía.
Actualmente, ambos países mantienen temas irritantes en el marco del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) en relación con el sector energético de México, la protección de los derechos de los trabajadores en México y posibles violaciones del T-MEC por las políticas de México sobre maíz genéticamente modificado, entre otros. En esa línea, Gutiérrez reconoció que hay aspectos en contra de México en un reporte preliminar sobre la controversia del maíz y afirmó que, en cualquier caso, respetará ese fallo.
“Estamos trabajando para pavimentar y revisar todos esos pendientes y llegar a la mesa de negociación sin pendientes”, comentó Gutiérrez al participar en un seminario organizado por el Colegio de México. Y mencionó como casos los del maíz, el acero y el ámbito laboral.
“Tenemos muchos temas que podemos ir solventando y facilitando para llegar a la mesa de negociación sin pendientes”, agregó, para luego comentar que México “está dando buenas señales de cambio” en su relación con Estados Unidos y Canadá.
El funcionario puso como ejemplo de una de esas buenas señales el Diálogo CEO México-Estados (U.S. México CEO Dialogue) y refirió que la presidente Claudia Sheinbaum tiene “claridad” sobre cómo avanzar en la revisión del T-MEC programada para 2026.
El pasado 22 de octubre se entregó a los gobiernos de México y Estados Unidos un reporte preliminar de la controversia del maíz, sobre el que México envió comentarios indicando que no está de acuerdo en algunas situaciones y se mantiene a la espera de la contestación para finales del presente mes.
“De manera preliminar, lo que están diciendo (en el reporte preliminar) es un poco que no reconocen nuestra necesidad de defender nuestro maíz del maíz transgénico”, refirió.
En otra arista, al final de su reciente campaña, Trump prometió que impondría un arancel de 60% a todas las importaciones desde China y amenazó con fijar un arancel de 25% a las de México, si la presidenta Sheimbaum no detiene lo que llamó una “avalancha de criminales y drogas” en Estados Unidos.
“Sería costoso cerrar camino a México”En su mensaje, Gutiérrez tocó este último punto argumentando que México tiene una “oportunidad histórica” para enfrentar el contexto actual.
“Los Estados Unidos pueden cerrar el comercio con China; pero no pueden, al mismo tiempo, o sería mucho más costoso, cerrar el camino a México. Si de por sí cerrarlo a México es complejo; cerrarlo a México y China, al mismo tiempo, sería prácticamente, en nuestra visión, una especie de suicidio”, comentó.
Estados Unidos y China enfrentan una guerra comercial-tecnológica, comenzada en la pasada administración de Donald Trump y que se profundizará eventualmente en su segundo mandato.
“Creemos en que como la prioridad hoy para Estados Unidos es el tema China, nosotros podremos salir muy bien librados si hacemos las cosas como se deben”, confió Gutiérrez.
“México no es un trampolín de China para exportación”
También el gobierno de Estados Unidos ha manifestado preocupaciones sobre la posibilidad de que China utilice a México como plataforma para eludir los aranceles estadounidenses a los bienes procedentes de China e invertir en el sector manufacturero en el mercado mexicano.
“Esta idea del trampolín es totalmente errónea”, refutó, manejando como argumento que las empresas extranjeras, principalmente estadounidenses, hacen 70% de las importaciones mexicanas desde China y poniendo como ejemplo que una compañía estadounidense realiza casi 40% de todas las importaciones mexicanas de autos originarios de China.
Al mismo tiempo, entre México y Estados Unidos hay colaboración para fortalecer las cadenas de suministro de semiconductores y tecnología de la información, la producción de vehículos eléctricos, la infraestructura fronteriza, el desarrollo económico en el sur de México y América Central, la tecnología de la información y la seguridad, y el desarrollo de la fuerza laboral.