La campaña agrícola 2024- 2025 se inicia con un ambiente marcado por la recuperación y el optimismo. Tras enfrentar los embates de fenómenos climáticos extremos como los fenómenos de El Niño Costero y La Niña, nuestros productores se preparan para una temporada de siembra con perspectivas altamente favorables.

De acuerdo con el Marco Orientador de Cultivos (MOC), se proyecta un incremento significativo en las superficies sembradas, superando tanto los niveles de la campaña anterior como el promedio de los últimos cinco años.

Este escenario positivo se sustenta en una combinación de factores que auguran un futuro promisorio para el sector, sostiene el representante del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego (Midagri) y coautor del MOC, Carlos Moreyra Muñoz. En primer lugar, las condiciones climáticas mejoraron considerablemente. La ausencia de eventos extremos como El Niño y la fase no activa de La Niña generaron un entorno más estable para el desarrollo de los cultivos. Esto es especialmente beneficioso en el caso de la papa, que requieren condiciones climáticas más frías.

En segundo lugar, los productores reciben precios adecuados por sus productos, lo que incentiva una mayor inversión en sus actividades agrícolas. En el caso de cultivos como el arroz y la papa, los precios se mantuvieron o estables o incluso aumentaron, generando mayor rentabilidad para los agricultores.

Asimismo, el MOC desempeña un papel fundamental al proporcionar información oportuna y confiable a los productores, orientándolos en la toma de decisiones y evitando desequilibrios en la oferta y la demanda. Este instrumento de gestión demostró su eficacia en la promoción de una agricultura más sostenible y rentable, precisa Moreyra. La producción agrícola muestra signos de recuperación este año, con un crecimiento del 4.5% en el VBP durante el primer semestre.

El Midagri proyecta un crecimiento anual del 3.8%, impulsado principalmente por el sector agrícola.

Las condiciones climáticas, según el último informe de la Comisión Multisectorial Encargada del Estudio Nacional del Fenómeno El Niño (ENFEN), favorecerán a algunos cultivos de sierra, mientras que en la costa podrían presentarse condiciones más frías. El Midagri trabaja en conjunto con gobiernos regionales para promover el MOC y garantizar que los productores tomen decisiones informadas basadas en las condiciones locales.
La campaña agrícola 2024/2025 augura un crecimiento del 4.3% en las áreas sembradas a escala nacional, según la encuesta a agricultores. Esto representa un aumento de 87,000 hectáreas en comparación con el promedio de los últimos cinco años.

Se proyecta una recuperación significativa en la producción de cultivos clave como arroz, papa y quinua, con incrementos de hasta un 47.8%. Estos resultados positivos se deben a condiciones climáticas favorables y a las políticas de apoyo al sector agrícola.

Perspectivas

De acuerdo con el viceministro de Políticas y Supervisión del Desarrollo Agrario, Christian Garay Torres, el análisis del MOC se centra en siete cultivos estratégicos de importancia nacional: arroz, papa, maíz amarillo duro, maíz amiláceo, maíz choclo, quinua y yuca, que representan el 33% del valor bruto de la producción (VBP) agrícola.

Este incremento, impulsado por las expectativas de los productores y condiciones climáticas favorables, se traducirá en una mayor oferta de alimentos básicos como el arroz, la papa y la quinua.

La recuperación de estos cultivos, especialmente afectada por eventos climáticos extremos en años anteriores, es una noticia alentadora para la seguridad alimentaria del país.
Además, el MOC permitirá a los agricultores tomar decisiones más informadas sobre qué y cuándo sembrar, optimizando así sus recursos y mejorando su rentabilidad.

El aumento de la producción agrícola no solo beneficiará a los productores, sino también a toda la cadena de valor, desde los industriales procesadores hasta los consumidores finales. Asimismo, contribuirá a dinamizar la economía rural y a reducir la dependencia de las importaciones de alimentos.

Este crecimiento proyectado es el resultado de una combinación de factores, entre los que destacan las políticas de apoyo gubernamental, el acceso a tecnologías agrícolas más eficientes y la creciente conciencia de los productores sobre la importancia de la sostenibilidad.

Impacto

La recuperación del sector agrícola no solo tendrá un impacto positivo en los productores, sino también en toda la cadena de valor y en la economía nacional. Un mayor volumen de producción generará mayores ingresos para los agricultores, impulsará el empleo en las zonas rurales y fortalecerá la seguridad alimentaria del país.

Sin embargo, es importante destacar que los desafíos persisten. La variabilidad climática sigue siendo una amenaza constante, y es necesario continuar invirtiendo en infraestructura de riego, sistemas de alerta temprana y tecnologías agrícolas adaptadas al cambio climático. Asimismo, se requiere fortalecer la investigación y el desarrollo para mejorar la productividad y la calidad de los cultivos.

Las perspectivas para la campaña agrícola 2024/2025 son alentadoras. La recuperación de las siembras, impulsada por condiciones climáticas favorables y precios adecuados, representa una oportunidad para fortalecer el sector agrícola y mejorar la calidad de vida de los productores peruanos. Sin embargo, es fundamental mantener una visión a largo plazo y adoptar medidas para garantizar la sostenibilidad y la competitividad del sector en un contexto global cada vez más desafiante.

Planificación agrícola

El MOC se convierte en una herramienta indispensable para la planificación agrícola en el Perú.

Este instrumento, diseñado para orientar las decisiones de siembra de los productores, se centra principalmente en cultivos transitorios, aquellos que tienen un ciclo de vida relativamente corto. Pero ¿por qué es tan importante el MOC para estos cultivos y, en particular, para los pequeños productores? Los cultivos transitorios, como la papa, el arroz y el maíz, son la base de la alimentación de millones de peruanos y sustentan la economía de numerosas comunidades rurales.

Sin embargo, su producción está sujeta a diversos factores, como las condiciones climáticas, los precios de mercado y la disponibilidad de recursos. Proporciona a los agricultores, especialmente a los pequeños productores de la sierra, información crucial para tomar decisiones más informadas sobre qué cultivos sembrar y cuándo hacerlo. Al considerar factores como las proyecciones climáticas, los precios de mercado y las tendencias de consumo, los agricultores pueden optimizar sus cultivos y reducir los riesgos asociados a la producción agrícola.

El MOC es mucho más que un simple documento; es una herramienta que empodera a los agricultores y contribuye al desarrollo sostenible del sector agrícola. Al centrarse en los cultivos transitorios, reconoce la importancia de estos cultivos en la dieta y economía peruanas. Es fundamental continuar fortaleciendo la implementación del MOC y dando el apoyo necesario a los pequeños productores para que puedan aprovechar al máximo los beneficios de esta herramienta.

Arroz y papa

- En el caso del arroz, se prevé en la campaña 2024/2025 la siembra de 427,427 hectáreas, lo que representará un incremento de 0.3% en comparación con las últimas cinco campañas agrícolas.

- Las regiones que experimentarán crecimientos de este cereal serán San Martín, Ucayali, Loreto, Tumbes, Cajamarca, Huánuco, entre otros.

- El aumento del cultivo obedecería a los precios favorables del arroz, el incremento de la demanda, la promoción del cultivo, la disponibilidad de mano de obra, mayor acceso de semillas de calidad y recurso hídrico.

- Sobre el cultivo de papa, se estima que en la campaña 2024/2025 se proyecta la siembra de 356,753 hectáreas, lo que significa un incremento de 4,4% en comparación con las últimas cuatro campañas agrícolas y 3,4% en relación a la campaña anterior.

- Las regiones con mayor producción serán Huánuco, Ayacucho, Áncash y Cusco y La Libertad, debido principalmente al aumento de la demanda, expansión de la frontera agrícola y condiciones climáticas favorables