Durante el período 2022/23 la producción de garbanzo en Argentina sufrió los efectos de la sequía y disminuyó en un 14 %. No obstante, para esta temporada se espera un incremento del 27 % de la producción de garbanzos en la provincia de Córdoba, el principal territorio productivo de esta legumbre. En nuestro país solo se consumen alrededor de 25 gr. de garbanzo por persona cada año (datos de la subsecretaría de Mercados Agropecuarios), por lo que su producción se destina en mayor medida a la elaboración de alimento para animales y exportación del grano. Por este motivo, el valor agregado que aporta la trazabilidad de los procesos de producción y multiplicación de este cultivo es vital para su competitividad en el mundo.
En este sentido, ucrop.it y Granaria SA combinan tecnología y logística de producción agrícola para potenciar una producción agro climáticamente inteligente, como sello de calidad para el garbanzo argentino. "Con esta visión, lo que perseguimos es una producción que propicie la seguridad alimentaria y que beneficie al productor con mayor eficiencia y rendimiento, a partir de una semilla multiplicada con bajo impacto ambiental que se refleje en su producción", señala Julieta Reginatto, Directora Técnica del Semillero de Granaria SA.
Por su parte, Marcos Botta, Co-Founder y CIO & COO (Chief Innovation and Operating Officer) de ucrop.it indica que "contar con materias primas agro climáticamente inteligentes es esencial para una cadena de valor eficiente, rentable, resiliente y segura, y para una agricultura sustentable, comenzando por nuestro campo. Por eso celebramos esta alianza que nos permite juntar tecnología y logística agrícola con los mismos objetivos: reducir el impacto ambiental de la actividad agrícola".
Para el productor, acceder a una semilla con trazabilidad para su producción es sinónimo de eficiencia y calidad comprobables en el ingreso a los mercados internacionales. Además, es el punto de partida para la elaboración de derivados con mayor seguridad alimentaria y valor agregado para la cadena de producción agrícola que beneficie a todos los actores de la industria. "La única manera de dar respuesta a la demanda global de sustentabilidad y consciencia ambiental es poder demostrar las buenas prácticas agrícolas con certificaciones y métricas confiables, y la trazabilidad es la herramienta para hacerlo", señala Botta.
El valor nutricional del garbanzo y su composición alta en carbohidratos y proteínas lo convierten en un aliado de la alimentación a base de plantas, una tendencia que cobra cada vez más relevancia, con empresas productoras de sustitutos como Tomorrow Foods.
Esto lo convierte en un producto clave para una demanda en crecimiento en el mundo, por eso, la trazabilidad y el acceso a la historia del cultivo permite a los productores cultivar a partir de estas semillas y posicionar su producción con valor agregado en los mercados.
El modelo de semillas agro climáticamente inteligentes que promueven Granaria SA y ucrop.it genera una cadena virtuosa para toda la cadena de valor basada en la resiliencia al cambio climático, la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero y la protección de los recursos naturales. Este enfoque tecnológico está ligado a la implementación de prácticas agrícolas que se adaptan al clima local y las condiciones del suelo, de la mano del registro de todas las actividades y la medición de indicadores de impacto ambiental de manera transparente.