Roma – Reelegido el domingo 2 de julio para un segundo mandato al frente de la Organización, el Sr. QU Dongyu, Director General de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), pronunció su discurso de apertura en el 43.º período de sesiones de la Conferencia de la FAO (1-7 de julio), en el que subrayó que era el momento de “reescribir el discurso relativo a la seguridad alimentaria”.

La Conferencia comenzó el sábado, 1 de julio con la elección de la Sra. Marie-Claude Bibeau, Ministra de Agricultura y Agroalimentación del Canadá, como Presidenta y la Disertación en memoria de McDougall a cargo del Sr. Tharman Shanmugaratnam, Ministro Superior y Ministro Coordinador de Políticas Sociales de Singapur.

En el discurso que pronunció ante la Conferencia, el Sr. QU Dongyu destacó que los sistemas agroalimentarios mundiales se enfrentaban continuamente a perturbaciones de distintas dimensiones e hizo hincapié en que la FAO y sus miembros no debían centrarse únicamente en los desafíos, sino también “encontrar oportunidades y adoptar medidas para avanzar”.
“¡Debemos iniciar la transformación!”, apremió el Sr. QU, recalcando la necesidad urgente de que los sistemas agroalimentarios fueran más eficientes, inclusivos, resilientes y sostenibles.
Es necesario poner en marcha medidas transformadoras y soluciones sólidas “a fin de que podamos lograr un mundo con una mejor producción, una mejor nutrición, un mejor medio ambiente y una vida mejor sin dejar a nadie atrás”, afirmó el Director General, citando las cuatro mejoras, que ha integrado en diversas reformas, iniciativas y programas aplicados desde que por primera vez se pusiera al frente de la FAO en 2019.

En el mensaje del Papa Francisco, leído por Monseñor Fernando Chica Arellano, Representante Permanente de la Santa Sede ante la FAO, el Pontífice felicitó al Sr. QU Dongyu por su reelección y le alentó a continuar trabajando “para erradicar el flagelo del hambre en el mundo, que está avanzando en lugar de retroceder”.

“Actualmente muchos expertos afirman que el objetivo del hambre cero no se cumplirá”, afirmó el Papa Francisco. “Permítanme decir que la incapacidad para cumplir nuestras responsabilidades no debe llevarnos a alejarnos de nuestras intenciones iniciales”.

Los factores impulsores de la seguridad alimentaria

El Director General centró su intervención en los conceptos que definen la seguridad alimentaria y señaló los factores impulsores relativos a la disponibilidad, la accesibilidad, la utilización y la estabilidad.

La FAO desempeña una función fundamental en diversos elementos interrelacionados con estos factores. Por ejemplo, el Sr. QU observó que, si bien el comercio de alimentos, tanto a escala mundial como intrarregional, era esencial, este se veía a su vez favorecido por la inocuidad alimentaria, una esfera de trabajo clave de la Organización. También declaró que, del mismo modo, apoyar la producción agrícola no alimentaria podía mejorar los ingresos rurales y, con ello, el acceso de los agricultores a los alimentos, y señaló además que trabajar para reducir las pérdidas y el desperdicio de alimentos era crucial para mejorar la utilización.

Para reforzar la disponibilidad de suficientes alimentos ricos en micronutrientes —una misión que se ve claramente reflejada en los conceptos de mejor producción y mejor nutrición— es necesario ofrecer y aprovechar la información científica, la innovación, las tecnologías y los conocimientos con miras a acelerar la producción, así como prestar una atención renovada a los alimentos saludables, según afirmó el Director General. Será esencial impulsar el suministro de los diversos alimentos adquiridos para el logro de estos objetivos.

El Sr. QU señaló que la disponibilidad de alimentos también exigía asegurar el acceso a alimentos nutritivos en situaciones de emergencia, lo que constituía el objeto principal de la labor conjunta con el Programa Mundial de Alimentos, la línea de trabajo de la FAO sobre emergencias y resiliencia, y la elaboración adecuada de las reservas alimentarias de emergencia.

Uno de los principales desafíos a los que nos enfrentamos en la actualidad es el factor de la accesibilidad, agravada por las tendencias de los precios y los ingresos, que se han visto agitadas por diversas crisis. Resulta especialmente preocupante que el precio de los productos alimentarios finales no esté siguiendo la tendencia a la baja del Índice de precios de los alimentos de la FAO durante los últimos 12 meses, debido en parte a las devaluaciones de los tipos de cambio.

“Esto significa que tenemos un problema con los países más vulnerables que dependen de las importaciones, que han de afrontar un aumento importante en el costo de las importaciones de alimentos, lo que ejerce presión sobre su capacidad para acceder a los alimentos que necesitan”, señaló el Sr. QU.

El Director General añadió que la FAO estaba proponiendo mecanismos a medio y largo plazo encaminados a incrementar la resiliencia, de modo que los países tuvieran los ingresos suficientes para satisfacer dichas necesidades, e hizo referencia a la propuesta de la Organización de crear en 2022 un servicio de financiación de las importaciones de alimentos, que fue incorporado por el Fondo Monetario Internacional como parte de su Ventanilla para Shocks Alimentarios, que ha desembolsado 1 800 millones de USD a seis países y recientemente se ha ampliado hasta marzo de 2024.

En términos generales, la disponibilidad de alimentos tiene que ver con el suministro de alimentos inocuos y nutritivos, mientras que la accesibilidad está relacionada con la demanda y la capacidad, según afirmó el Sr. QU. “Estos conceptos están interrelacionados, no son independientes entre sí” y en su conjunto están directamente relacionados con el concepto de una vida mejor, añadió.

Garantizar la estabilidad del suministro de alimentos consiste en asegurarse de que la disponibilidad, la accesibilidad y la utilización no se vean obstaculizadas por escaseces, situaciones de emergencia o crisis repentinas.

“Aquí es donde la mejora relativa a un mejor medio ambiente desempeña una función decisiva”, declaró el Director General, poniendo de relieve la necesidad de hacer frente a las perturbaciones climáticas, las temperaturas extremas, las plagas y enfermedades y los ciclos del agua. Aumentar la resiliencia frente a estos desafíos supone centrarse en la prevención, a través de sistemas de alerta rápida, el enfoque de “Una sola salud” y nuevos instrumentos de seguro, reforzar los amortiguadores de las perturbaciones dando prioridad a la realización de inversiones en todo el mundo orientadas al incremento de la productividad a fin de producir más con menos, y diversificar la producción.

Iniciativas básicas

El Director General señaló las iniciativas básicas que había puesto en marcha durante su primer mandato en la FAO con objeto de lograr el noble objetivo de erradicar el hambre.

La Iniciativa Mano de la mano emplea sistemas avanzados de modelización geoespacial y un robusto enfoque de establecimiento de asociaciones para brindar apoyo a programas dirigidos a nivel nacional encaminados a acelerar una transformación de los sistemas agroalimentarios basada en el mercado en beneficio de las personas más vulnerables. Alrededor de 64 países participan actualmente en la Iniciativa.

La Iniciativa ciudades verdes se centra en mejorar la resiliencia de los sistemas alimentarios urbanos y en crear entornos más saludables en las ciudades, donde vive una proporción de la población mundial en rápido crecimiento.

La Iniciativa de las 1 000 aldeas digitales promueve la digitalización —de la cual el Sr. QU es un abierto defensor— en las zonas rurales con miras a promover las oportunidades de ingresos y medios de vida para beneficiar a las comunidades locales.

El programa Un país, un producto prioritario ayuda a los países a aprovechar su potencial mediante la determinación de productos agrícolas especiales que pueden reportar beneficios a los agricultores familiares que trabajan en productos y procesos emblemáticos desde el punto de vista cultural.

La Transformación azul es esencial para reforzar la pesca y la acuicultura de modo que puedan aportar mejores nutrientes a todas las personas de forma respetuosa con el clima y con bajas emisiones de carbono.

Por último, el Sr. QU hizo hincapié en que la atención se había centrado en la ejecución de estas iniciativas junto con los Miembros.