La Federación de Acopiadores recibió en sus oficinas al secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, Juan José Bahillo, para repasar junto a los presidentes de once centros de acopio de todo el país, aspectos clave para este sector y para la campaña agrícola en curso. El funcionario estuvo acompañado por Juan Manuel Fernández Arocena, jefe de Gabinete de Asesores de la Secretaría, y Luciano Zarich, subsecretario de Mercados Agropecuarios.
En primer lugar se abordó la realidad de la siembra de granos finos, que ha avanzado ya sobre sectores que tienen suficiente humedad en el suelo, pero aún está a la espera de lluvias que recarguen los perfiles en gran parte de la zona agrícola nacional, con zonas específicas en situación límite. Los acopiadores plantearon que, ante ese contexto, muchos productores han decidido esperar para invertir en el paquete tecnológico y no han anticipado sus compras aguardando nuevas precipitaciones que puedan dar indicios sobre qué resultados tendrán sus cultivos de invierno.
En segundo término, y teniendo en cuenta que las más de 800 empresas acopiadoras venden hasta un 40% de los insumos y son responsables del 50% de la comercialización de granos, insistieron sobre la necesidad de propiciar incentivos para el uso de tecnología de insumos a través de líneas especiales que fomenten los canjes con prefinanciación de exportaciones, algo en lo que la Federación viene trabajando en conjunto con el Banco Nación, y confía en los aportes que pueda hacer la Secretaría para agilizar la puesta en marcha. Desde la Federación también recordaron la importancia de derogar la restricción que implica tener menos del 5% del stock de soja producido para acceder a los créditos bancarios.
La infraestructura fue un apartado en el encuentro: se abordó la situación de aquellas plantas de silo construidas en terrenos ferroviarios que aún no tienen la escritura o dominio de los mismos debido a las trabas burocráticas con las que se encuentran. Las autoridades de la Federación pusieron énfasis, una vez más, en que es imprescindible regularizar esta situación, que lleva hasta 50 años de arrastre, para asegurar la plena utilización en la logística de granos, que hoy se ve afectada también desde el punto de vista de las exportaciones y atenta contra el desarrollo de pequeñas localidades del interior profundo de Argentina. En paralelo, se dejó en claro que hay una necesidad concreta de acceder a financiamiento a largo plazo para realizar inversiones en las plantas y particularmente para relocalizar construcciones que, con el crecimiento de los pueblos y ciudades, han quedado en áreas urbanas. También indicaron que se debe clarificar y dar certeza a los operadores sobre la importancia de los galpones ferroviarios para la logística y el transporte de granos.
Desde el acopio también recordaron a las autoridades aspectos relacionados con la comercialización de granos. En particular, pusieron de relieve las modalidades adoptadas por algunos compradores que claramente atentan contra la transparencia de los mercados, el equilibrio entre las partes y el proceso de descubrimiento de los precios en competencia.
Por último, la Secretaría adelantó que están trabajando fuertemente en la modificación y modernización del sistema de información de precios conocido como SIO Granos, en colaboración con todos los actores de la cadena -incluida la Federación de Acopiadores- para obtener información más amplia y certera.