Aunque no fueron pronunciadas, las bajas en la jornada de ese lunes se destacaron en la soja y en los subproductos, en el mercado de Chicago.
La acción de los especuladores, que detonaron una suerte de avalancha de ventas, fueron los responsables de la tónica del lunes.
Ello sucedió en un cuadro de caída de valores del petróleo cuya tendencia negativa sigue sin detenerse.
Se trata de un proceso que empezó en junio del año pasado. Miremos el gráfico (en dólares y en euros).
Por fortuna para los precios de la oleaginosa, la trilla en Brasil, el principal exportador de soja, sigue retrasada.
Según AgRural el avance de la cosecha de soja de Brasil ha cubierto solo el 9% del área, frente al 16% de igual fecha del año 2022.
Además, en Rio Grande do Sul el clima caluroso y seco sigue reduciendo el potencial de rendimiento de las sojas.
En tanto, pese a las lluvias acaecidas, la situación no ha dejado de ser grave. Y ello, debería operar como trampolín de los valores.
Siendo así las cosas, es lógico sospechar que esta baja es tan solo un hecho esporádico
Pero, lo que hoy pesa sobre el mercado global es la evolución de la cosecha en Brasil.