El legislador formoseño, compartió un documento elaborado junto a la Mesa Agropecuaria de la Fundación Alem. "Es una medida más que, además de ser aislada y no está contenida en un plan económico, tiene características negativas, ya que su discrecionalidad es compulsiva, tiene aspectos extorsivos y su plazo es cortísimo, lo cual constituye un combo que puede tener graves consecuencias", mencionaron en el comunicado.
Otra de las críticas que elaboraron, es el carácter "cortoplacista" de la norma, "nadie puede arriesgar a pensar escenarios posibles para el día después respecto a los beneficios posibles. Y lo peor, sobre en las consecuencias negativas no mensuradas al momento de la sanción de la medida", aclararon.
En ese contexto, afirmaron: "Todo parece indicar que se convalida que el ministro de Economía defina un precio según necesidades de caja o posición de reservas y los plazos por los cuales se interviene en el principal mercado aportante de divisas del país". Además, agregaron: "Hoy lo hace sobre el complejo sojero y próximamente no sabemos a qué sector económico intervendrá. No desconocemos que circunstancialmente beneficia a algunos actores, pero es necesario advertir que también perjudica a muchos otros, por ejemplo, a quienes vendieron su soja durante estos últimos meses".
"A través de esta medida el Gobierno genera un tipo más de cambio diferencial para un sector específico, pero no tiene en consideración al resto de las actividades económicas propias del sector agroindustrial ni a los otros sectores de la economía argentina". Finalmente, sentenciaron: "Atenta contra cualquier sistema de incentivo productivo y es posible que esto genere aún más distorsión en los precios relativos de productos e insumos".