A pesar de la reciente disminución de los ingresos, la demanda de nueces chilenas es fuerte y los contactos del sector anticipan un crecimiento continuo a largo plazo. La superficie de nogal plantada se encuentra en la zona centro-sur del país, entre las zonas de Valparaíso y Maule.
La principal zona productora es la Metropolitana, que representa el 37,6% de la superficie plantada. La superficie plantada ha crecido un 16,4% en los últimos tres años.
En cuanto a las exportaciones de nueces se proyectan en 162,500 toneladas con cáscara, lo que representa un crecimiento del 7,6 por ciento sobre la campaña 2021/22. Para la campaña 2022/23, se proyecta que la producción de almendras alcanzará las 11.400 toneladas, lo que supone un aumento del 3,6% respecto a la campaña 2021/22, gracias al aumento de la superficie plantada y al incremento de los rendimientos.
La entidad indicó, que las exportaciones de almendra serán de 8.250 toneladas, un aumento del 3,1 por ciento respecto a la campaña 2021/22. En tanto, Se espera que el consumo de almendras en Chile alcance las 7.900 toneladas. Estados Unidos sigue siendo el principal proveedor de almendras de Chile, con una cuota de mercado del 98 por ciento.
Superficie plantada
El USDA estimó que la superficie plantada crecerá un 1,8% en la campaña 2022/23 y alcanzará las 44.500 hectáreas. La superficie plantada de nogal alcanzará las 43.375 hectáreas en la campaña 2021/22, lo que significará un crecimiento del 0,1% respecto a 2020/21.
El alza esperada está en línea con los cambios históricos, ya que la superficie plantada ha crecido de manera constante desde la campaña 2011/12. A partir de la campaña 2020/21, el crecimiento de la superficie plantada se ha ralentizado debido a la disminución de los ingresos de los exportadores chilenos de nueces por la subida de los costos de producción, procesamiento y transporte.
Reacciones de ChileNut
En cuanto a los datos entregados por el informe del USDA, Edmundo Valderrama, presidente de ChileNut afirmó a Portal Frutícola que los datos están errados ya que es poco acorde a la realidad del negocio.
“Lo primero que llama la atención en el informe es la estimación de cosecha, que indica que la fuente es Odepa. Hasta donde sabemos Odepa no genera proyecciones de cosechas, y la cosecha que indica es 165 mil toneladas que probablemente se corta en 10 mil toneladas. El número que manejamos son 175 mil toneladas”, comentó Valderrama.
El presidente de ChileNut explica que el reporte señala que la superficie plantada ha ido bajando, lo que es cierto. Sin embargo, el documento enfatiza que la caída en las plantaciones registradas en los últimos años es causa a la caída en los retornos en los exportadores, a lo que comentó; “cuando las decisiones las toman los productores, no los exportadores. La decisión por lo cual se ha ido bajando las plantaciones se debe a la baja del retorno en los productores la cual se debe porque hay una caída en el mercado general de las nueces”.
En ese escenario, Valderrama dijo que la oferta ha ido creciendo más rápido que la demanda, la cual crece, pero no tan rápido como la oferta y los precios han caído en los últimos tres, cuatros años de forma importante, lo que ha generado que los productores no solo en Chile sino en todo el mundo hayan bajado su nivel de plantación de forma muy violenta. "Lo que no tiene nada ver que ver con el aumento de costos de producción, de proceso ni de transporte”.
En cuanto al aumento en la cosecha para 2022-2023, que señala el reporte, Valderrama aclaró que ellos siempre hablan corrido de las temporadas porque tratan de asimilarlas a las temporadas de ellos. Cuando hablan de 2022-2023 se refieren a la cosecha chilena de 2022.
“Pese a las condiciones resistidas del agua, se logró tener condiciones de crecimiento y de cuaja, de productividad. El agua estuvo resistida pero los productores tuvieron un muy buen manejo, pero la razón por la cual creció la cosecha no es por un tema de disponibilidad de agua”, comentó Valderrama.
El consumo interno esta subvaluado en este informe, afirmó Valderrama "ya que es casi la mitad de lo que es realmente, por lo tanto, no cuadra”.
Respecto a que en la primera parte del año los embarques fueron lentos por problemas logísticos en marzo, abril y mayo, Valderrama aseguró que “lo que no es cierto”.
“Si hablas con cualquier persona de la industria, no había problema de disponibilidad con lo mencionado. Primero la cosecha fue casi dos semanas más tarde, más lenta que los años anteriores lo que se noto muy fuerte en los embarques de mayo, pero en el fondo la demanda temprana, este año no lo fue tanto por el embarque tardío en California. Por lo tanto, el análisis es errado, no hay un problema logístico. Si hablas con cualquier exportador grande en marzo, abril, mayor, junio no tuvieron problemas”.