El incremento en los precios de los alimentos continuó mermando el poder adquisitivo de los hogares mexicanos, al alcanzar en julio una tasa de inflación que no se veía desde 1999, de acuerdo con la información actualizada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
En el séptimo mes del año, los alimentos –considerando las mercancías alimenticias, así como los productos agropecuarios– mostraron un incremento anual de 13.94%, el mayor del que se tiene registro desde agosto de 1999, cuando aumentaron 14.75 por ciento.
El incremento desmedido en los precios de los alimentos ocurre en una coyuntura donde el gobierno de Andrés Manuel López Obrador continúa implementando el Paquete Contra la Inflación y la Carestía (Pacic), el cual intenta estabilizar los precios de algunos productos.
El precio de los alimentos, explicó la organización México ¿Cómo Vamos? se ha visto fuertemente afectado por la guerra en Ucrania, la cual empezó a finales de febrero pasado y ha su impacto radica en la importancia que tiene la región en la producción de trigo y de fertilizantes.
(La inflación en alimentos) continúa con una trayectoria al alza. Esta situación es alarmante ya que, en México, 38.8% de la población se encuentra en pobreza laboral”, agregó la organización.
En este tenor, el Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) señaló que la inflación impacta, en mayor medida, a los hogares de menores ingresos debido a la composición de su canasta de consumo, que le da prioridad a los alimentos y productos básicos.
“Dependiendo del nivel de ingresos, los hogares distribuyen sus recursos de manera diferente: mientras que un hogar representativo del decil I (con menos recursos) debe destinar 50% de su gasto al rubro de alimentos, bebidas y tabaco, la proporción que un hogar del decil V le dedica a dichos bienes es de 43%, y en el decil X es de sólo 28 por ciento. Dado que la inflación actual es más pronunciada en bienes alimenticios y agropecuarios, estos incrementos afectan más a quienes asignan una mayor proporción del gasto a esos productos: los hogares con menos recursos”, agregó.
Nuevo récord parala inflación
El incremento en los precios de los alimentos fue la mayor presión para la inflación general en julio, la cual alcanzó el mayor nivel desde hace más de dos décadas. En el séptimo mes, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) presentó un avance mensual de 0.74%, mientras que a tasa anual los precios aumentaron 8.15 por ciento.
De esta forma, la inflación alcanzó su nivel más alto desde diciembre del 2000, cuando los precios se incrementaron 8.96%, además de sumar 17 meses fuera del objetivo del Banco de México (Banxico) de 3% +/- 1 punto porcentual.
La inflación en julio se ubicó ligeramente por arriba de la proyección del mercado, el cual esperaba que los precios se aceleraran 8.13%, de acuerdo con el sondeo de Reuters.
“Estimamos que la inflación vea un máximo en agosto y se empiece a moderar posteriormente. Parte de la desaceleración se deberá a una alta base comparativa (efecto aritmético). Además, suponemos que algunos cuellos de botella en la producción, asociados a la pandemia, se seguirán desvaneciendo gradualmente. También ayudará la reciente corrección en los precios de diversas materias primas. Por último, estimamos menores presiones de demanda, en la medida en la que el consumo privado sea afectado por la erosión del poder adquisitivo, altos costos financieros y menor confianza”, señaló Alejandro Saldaña, subdirector de Análisis Económico de Ve por Más (Bx+).
El dato dejaría la puerta abierta para que Banco de México (Banxico) continúe con el endurecimiento de su política monetaria, por lo que se espera que en su próxima reunión, este jueves, incremente su tasa en otros 75 puntos base.
En lo que va del año, la Inflación ha sido el dolor de cabeza a nivel mundial. Impactada por los choques de oferta por la pandemia, los precios al consumidor empezaron a incrementar aún más luego del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, lo que ha disparado los precios de los energéticos y los granos.
Esto ha llevado a que varios organismos, como el Fondo Monetario Internacional, adviertan de los efectos adversos de los altos niveles de inflación en la economía y, sobre todo, en la población de menores recursos, a la vez que los bancos centrales han incrementado sus tasas de interés para intentar contener los avances.
Aumento generalizado
El informe del Inegi mostró que, nuevamente, el aumento en los precios se dio de manera generalizada; no obstante, los precios de las mercancías continúan como la mayor presión para los bolsillos de los mexicanos. El índice subyacente, que elimina de su precio los productos y servicios con precios más volátiles, mostró una tasa de 7.65% anual.
Esto se debió a que las mercancías vieron un incremento en su precio de 10.07%, explicado principalmente por un aumento de 12.07% del rubro de los alimentos, bebidas y tabaco.