América Latina y el Caribe se unió a la Iniciativa Global Un País, un Producto Prioritario (UPUP)- OCOP, por sus siglas en inglés- la cual consiste en el Desarrollo de Productos Agrícolas Especiales y es impulsada por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO).
El objetivo de UPUP es apoyar a pequeños agricultores a impulsar productos agrícolas con valor especial – desarrollados con prácticas sostenibles e innovadoras– en los mercados globales, que cuenten con cualidades únicas y características asociadas a ubicaciones geográficas y patrimonios culturales. En la región, Argentina y Chile están trabajando con la miel, Brasil, Costa Rica, Ecuador, Trinidad y Tobago y Venezuela están trabajando con el cacao y Cuba, Guatemala y Panamá con el café y Nicaragua quiere promover la ganadería. Para impulsar estos productos, la FAO capacita a los países en la aplicación de una metodología llamada Iniciativa de los Sistemas Agroalimentarios Integrados (IASI por sus siglas en inglés), creada por Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo.
Esta metodología analiza la situación actual de un producto y permite proyectar escenarios futuros, construyendo así planes estratégicos entre gobiernos, productores, investigadores, sociedad civil y privados, que permiten establecer prioridades y objetivos a largo plazo para apoyar la intensificación sostenible de los sistemas agroalimentarios seleccionados.
El caso de la miel en Argentina
El producto seleccionado en Argentina es la miel y se trabaja en 3 aspectos básicos: mejorar la producción y la productividad; aumentar la sostenibilidad ambiental y la resiliencia climática; y brindar valor agregado y acceso a los mercados. Para ello, fue necesario hacer una Carta de Acuerdo entre la FAO y la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires (FAUBA), en coordinación con el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación (MAGYP). Asimismo, en esta iniciativa hay contribución del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), la Sociedad Argentina de Apicultores (SADA) y la Cámara Argentina de Fraccionadores de Miel (CAFRAM) que representa a 40 establecimientos, donde el 80% de socios son cooperativas y consorcios.
El objetivo con UPUP es lograr un análisis del mercado y el desarrollo de estrategias para diferenciar a la miel argentina en los mercados internacionales, para dejar de exportar en tambores y pasar a exportar un producto más consolidado al mundo y con valor agregado, al tiempo que se busca armar una base de datos georreferenciados de apicultores familiares que sirva de base para concretar políticas públicas adecuadas.
La actividad apícola en la Argentina se desarrolla en casi todas las provincias y utiliza un 95% de insumos de producción nacional. Se estima que hay poco más de 35 mil productores apícolas y, de acuerdo con el número de colmenas que tienen, el 85% de ellos son pequeños y medianos y un 15% son de escala más grande. También hay productores independientes y otros que trabajan agrupados.
Según datos del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca (MAGyP), Argentina se ubica entre los tres principales productores de miel a nivel mundial, siendo el segundo exportador con un volumen promedio superior a las 75.000 toneladas anuales de cuyo total 75% se exporta y 25% se consume a nivel interno.
La producción apícola admite una diversidad de productos: miel, polen, jalea real, cera, propóleo, núcleos, reinas, polinización, apitoxina y subproductos tales como cerveza con miel, cosmética apícola, caramelos de miel y propóleo, velas a partir de la cera natural de las abejas y la hidromiel o aguamiel, una bebida producida solo a base de miel, agua y levadura, que contiene acciones benéficas para la salud. Chile, Guatemala, Trinidad y Tobago y México
El 90 por ciento de la miel que produce Chile es exportada a la Unión Europea y a Estados Unidos. La miel es una gran oportunidad de negocios para las 10 mil explotaciones que se dedican a la miel en el país, con 454 mil colmenas que generan distintos productos apícolas; UPUP trabajará para dotar al sector de una estrategia de valor y posicionamiento de la miel para el mercado externo e interno. Guatemala es uno de los principales exportadores de café a nivel mundial: más de 120 mil caficultores de pequeña escala y sus familias dependen directamente del café, y el sector genera más de 500 mil puestos de trabajo.
La FAO busca apoyar al país a impulsar la inversión en innovación, tecnología, capacitación, asistencia técnica y mercadeo, para mejorar el desempeño del sector.
Trinidad y Tobago es uno de los ocho países certificado como productor de cacao fino de aroma, un producto de alta calidad y reconocimiento internacional. El 65 por ciento del cacao del país proviene de pequeños productores (menos de 5 hectáreas), y el país exporta mayoritariamente granos fermentados. El potencial económico total de este producto se encuentra actualmente sub-explotado; FAO busca impulsar la inversión en el fortalecimiento de esta cadena de valor, otorgando inteligencia de mercado.
En México, UPUP trabajará con el amaranto, producto de gran importancia para pequeñas y pequeños productores del centro y sur de México. El amaranto se cultiva en superficies menores a una hectárea, bajo sistemas agrícolas tradicionales, como la milpa y las chinampas.
A pesar de sus propiedades nutricionales, alimenticias y de sus características de adaptación climática, el amaranto enfrenta una baja demanda en la población mexicana: UPUP buscará trabajar para potenciar su consumo.
Un País, un Producto Prioritario
La iniciativa UPUP fue lanzada a nivel mundial por el Director General de la FAO, QU Dongyu, en septiembre de 2021. Las experiencias de Chile, Guatemala y de Trinidad y Tobago, fueron presentadas en el lanzamiento regional realizado el miércoles 25 de mayo de 2022.