Esta reliquia se trata de la única planta que quedó viva de la tala que mandó a hacer en América el Rey Carlos III en el siglo XVII. Y, según cuentan los productores de la zona, a este árbol se denomina "Padre de la Olivicultura", ya que a partir de este ejemplar se volvió a expandir la olivicultura no solo en Argentina, sino que también de estas plantas se llevaron hijuelos a Chile y Perú.
Pero su presente es más bien preocupante, ya que puede morir en cualquier momento. Una bacteria se metió en su interior por lo que se está secando, al igual que todas sus hijas de la región que con tanto esfuerzo los productores locales plantaron, cuidaron y obtienen de su producción su único medio de subsistencia.
"Es muy cruel lo que estamos viviendo, hace años que pedimos ayuda para salvar a nuestros olivos que se secan de a poco y mueren. Nadie nos da solución, parece que no les importa que se pierda un símbolo como es la producción del olivo en manos de los pequeños productores", dice Juana Nieto, productora olivícola de la Filial de Aimoarauco de FAA.
Por su parte, José Romero explicó que la situación ya es demasiado indignante: "hemos golpeado muchas puertas pidiendo soluciones y nos responden con tecnicismos y desidia ante un flagelo que nos causa mucho daño económico y una angustia diaria al ver cómo se nos van secando los olivos de los cuales vivimos".
El presidente de FAA, Carlos Achetoni dijo al respecto: "planteamos hacer una asamblea de productores, donde vamos a visibilizar esta situación a nivel nacional. Luego solicitaremos la presencia de técnicos y autoridades de INTA, SENASA y el MAGyP para que den respuestas y se pueda generar certidumbre de qué hacer ante este flagelo sin solución".
Y añadió: "De una vez por todas este tema se tiene que abordar con la seriedad que se merece y encontrar la solución para que los productores de olivos puedan seguir produciendo. El tema sanitario y los precios muy similares al año anterior, con una inflación por encima del 50%, definitivamente va a dejar afuera del sistema a muchos pequeños productores, concentrando aún más esta actividad".
Y concluyó: "Es muy triste que un día que siempre fue de algarabía en esta región, hoy sea así, con productores que no encuentran nada que celebrar, al ver morir sus olivos. Vamos a hacer todo lo posible para revertir esta situación que afecta a tantos productores familiares" finalizó el presidente de FAA.
Fuente: FAA