El Departamento de Agricultura de Australia está interesado en realizar un intercambio de tecnología e información con Uruguay acerca de su Plan Nacional Estratégico para el Control del Perro Salvaje, para ayudar a Uruguay a evitar y disminuir las pérdidas productivas causadas por ataques de cánidos a las majadas.
El apoyo incluye el acceso a herramientas como el escaneo de las actividades de más jaurías en las zonas afectadas y otras plagas.
Así lo hizo saber Iam Mortimer, Consejero Agrícola de Australia en América del Sur, perteneciente a la Embajada de Australia en Chile, al final de su conferencia: “Experiencia australiana en el control de perros silvestres”, organizada por la Asociación Rural del Uruguay, en el marco de la Expo Melilla.
Las acciones de apoyo pueden incluir la visita del coordinar nacional del plan, para que analice y discuta con productores, sociedad y gobierno, las acciones más adaptables a la realidad de Uruguay.
Si Australia puede controlar las poblaciones de Dingo y perros salvajes en su territorio, Uruguay debería poder controlar los perros con y sin dueño que causan pérdidas productivas importantes y que incluso, limitan la expansión del rubro ovino en muchas zonas.
El primer plan australiano comenzó en 2014 y finalizó en 2019. Ahora está en marcha otro que va de 2020 a 2030, basándose en el éxito del primero .El gobierno ofrece un buen financiamiento para el control de los perros y controla las acciones haciendo cumplir un marco legal estricto.
Herramientas. El plan australiano utiliza como herramientas trampas de captura, cebos con venenos con aplicación estrictamente controlada y autorizada por el gobierno para evitar daños a la fauna silvestre y las personas. En estos casos el fin es la eutanasia del animal, al igual que el uso de armas de fuego (con un estricto marco normativo y legal). La eutanasia se aplica también a los perros con dueños que hayan incumplido la tenencia responsable. “Aunque estén en zonas urbanas son considerados perros salvajes y se aplica la misma estrategia. Hay legislación específica que describe lo que es un perro salvaje y la diferenciación con el Dingo”, explicó Mortimer.
Entre la estrategia del Plan Nacional, en las zonas donde los Dingo y perros salvajes tienen menor población, se utilizan animales de guardia para alejar a los cánidos y sistemas de vallado con una altura de 1,70 metros. Esas cercas protegen al ganado y las poblaciones, evitando pérdidas productivas.
“Los cebos para perros están aprobados por las autoridades australianas. Su uso y manipulación se establecen en la normativa estatal. Eso también se aplica a los nuevos venenos que se aplican en las trampas”, explicó Mortimer.
Apoyos. El experto detalló que el gobierno ofrece un buen financiamiento para el control de los perros salvajes, pero también hay tasas para el sector privado y la industria. Esas tasas impositivas son asumidas como parte del costo de producción, explicó el experto australiano.
Para el Plan 2020-2030, en la primera etapa, la inversión total demandó US$ 2,3 millones y se calcula un beneficio de entre US$ 16 y US$ 46 millones por menores pérdidas productivas, menos predación sobre fauna protegida y menor impacto de enfermedades zoonóticas sobre las comunidades.
Globalmente, el gobierno australiano hizo una inversión de alrededor de US$ 50 millones para controlar los perros salvajes. La ley y las acciones se aplican a perros con dueño que no son controlados, basándose el pilar de la tenencia responsable.
Lo otro importante es señalar que todas las acciones fueron consensuadas por la comunidad y no hay impacto, ni social, ni económico, sobre los mercados de Australia. El uso del cercado abarca 5.400 kilómetros y “los productores usan más esta herramienta en las zonas con bajas poblaciones”, dijo Mortimer. Incluso su ventaja es que también permiten controlar cerdos salvajes y ciervos, que también son una plaga.
Similitud. Para el subsecretario de Ganadería, Agricultura y Pesca, Ignacio Buffa, escuchar experiencias de otros países “siempre es enriquecedor”.
El jerarca de gobierno consideró que “hay cosas que son comunes a la realidad de Uruguay.
La base de la estrategia australiana tiene bases similares a la que está desarrollando Uruguay”, como “la generación de los consensos sociales para validar la estrategia a implementar, la posibilidad de poder controlar a través de disparos los perros es algo que también es posible en Uruguay a través del Artículo 125 del Código Rural, la posibilidad de trabajar con cercas también está disponible y la posibilidad de trabajar con especies protectoras de las majadas se aplica”.
Buffa explicó que “Australia tiene para los Dingo y perros asilvestrados una estrategia de eliminación, que es lo que jurídicamente hoy no está permitido en Uruguay por ley esa posibilidad de controlar mediante la eutanasia. Esa es la diferencia en términos jurídicos más grande”.
A su vez, consideró que existe “una diferencia importante entre lo que es la realidad de la problemática que tiene en Uruguay el daño a las majadas causado por los perros, que en muchos de los casos se da por la tenencia irresponsable. Ahí tenemos alguna diferencia en cuanto a la naturaleza del problema, si bien el efecto es el mismo, las ovejas se mueren”, entendió Buffa.
Acciones. El subsecretario del MGAP remarcó que la actual administración de gobierno, en este tema, “le puso el cascabel al gato y para un tema complejo, comienzo requieren las cosas. Esta administración comenzó un proceso de poner el tema encima de la mesa. Hoy estamos en una actividad como la Expo Melilla hablando del problema de los perros. Creo que eso es bien saludable y esta administración está dispuesta a avanzar en un proceso de solución a esta problemática”.
También destacó que otras de las cosas que planteó el australiano en su charla es el compromiso y la participación de todos los actores. “En Uruguay es parte de lo que hicimos en el marco del Instituto de Bienestar Animal, donde se generaron convenios con todas las intendencias para territorializar esta política. En ese sentido creo que hay muchas coincidencias respecto a la estrategia, hay algunas herramientas operativas que no las tenemos en Uruguay, pero que creemos que tenemos en términos conceptuales, muchas de las cosas que está haciendo Australia dentro de su estrategia”, sostuvo Buffa.
Fuente: El Pais - Uruguay