Los precios de la soja en la rueda diaria de Chicago, otra vez, en leve baja.
Pese al retiro de ganancias, la baja resultó extremadamente suave, a consecuencia de la guerra, que va tomando un color cada vez más sangriento.
Y donde bien podría iniciarse una escalada que bien podría involucrar a terceros países.
El comercio desde la región del mar Negro y del mar de Azov se halla paralizado.
Así el cuadro, lógicamente, la exportación de aceite y de harina de soja, proveniente de EE.UU. es la que sale ganando.
Por otra parte, las estimaciones sobre la producción de Brasil sigue en caída rauda. La consultora brasileña AgRural acaba de reducir de 128,50 a 122,80 millones de toneladas la estimación de la cosecha de soja en este país.
Los precios siguen evolucionando sobre una cuerda tirante pero con un equilibrio de difícil predicción.
Eso sí, no hay nada en el horizonte que indique una baja pronunciada en los precios.