El margen de pérdidas para este rubro oscilaba en 80% y hasta el 90% de acuerdo a los datos de las zonas más afectadas por la falta de precipitaciones. Los informes de los técnicos que monitoreaban este sector mostraban que la situación en los campos de cualquier tipo de producción llegaba a menos de 10% de recuperación.
Sin embargo, en algunos campos, mediante un nuevo sistema de producción, pequeños productores como los de San Pedro del Paraná, departamento de Itapúa, señalaron que redujeron tasas de pérdidas con trabajo coordinado con técnicos del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG). Diosnel Barrios, ingeniero agropecuario y técnico del comité San Francisco de la zona, explicó en comunicación con La Nación sobre las ventajas del sistema conservacionista para la producción en épocas de prolongada sequía.
“Este es un sistema de producción al que le denominamos conservacionista, en
donde el objetivo principal es la recuperación del suelo por medio de la
utilización del abono verde. Para llegar a estos resultados lo ideal es hacer
una planificación porque este es un proceso largo. Lo que hacemos es introducir
cada año abono verde. Cuando termina el ciclo del producto cosechado
introducimos el abono verde”, manifestó el experto.
Sostuvo que la práctica de este sistema se realiza en pequeñas porciones de tierra hasta que la recuperación, mediante la rotación de cultivos, se pueda lograr a fin de seguir con los demás espacios. “Con la sequía de este año se tuvo una buena producción de sandía, cebolla verde y ahora estamos con el maíz y la mandioca. No podemos negar que hubo pérdidas pero fue alrededor de un 10%”, indicó.
Respecto a los demás productores que utilizaron un sistema convencional de producción con el que lograron un total de 800 kilos por hectárea, en el caso del maíz, ésta finca, que practica el modelo conservacionista desde hace 8 años, terminó con un total de 6.300 kilos por hectárea. Barrio señaló que el promedio en buenas temporadas rondaba los 6.800 kilos por hectárea, por lo que se evidencia una pérdida de sólo el 10% aproximadamente.
Buscan sustituir remoción de suelo
Las practicas convencionales para la producción están siendo sustituidas por sistemas bien planificados, con la utilización de abonos preparados para la conservación de las proteínas del suelo. El técnico del MAG dijo que uno de los principales objetivos del sistema conservacionista es el reemplazo de la remoción de suelo, rastroneada o arado a partir de bueyes.
“Esa es la principal causa de la degradación del suelo. Realizan la remoción y el suelo queda expuesto por lo que al registrarse una lluvia se arrastran los nutrientes quedando el suelo sin beneficios. Hoy en día se está terminando eso porque está demostrado todas las consecuencias que deja en la tierra”, apuntó.
Barrios aseguró que las ventajas se ven en el control de las malezas, el manejo de la sequedad de la tierra, el control del agua en el suelo y las recuperación productiva del suelo que puede durar más años respecto a la utilidad que tenía hace años atrás con viejos sistemas de producción.