La agroindustria nacional se consolida, año tras año, como el principal sector generador de divisas en nuestro país. En los primeros seis meses de 2021, los complejos que componen el sector realizaron exportaciones por US$ 24.200 millones, representando el 70% de las exportaciones totales del país en el período.

Evolución en los últimos 20 años

A principios del milenio, el sector agroindustrial representaba cerca del 46% de las exportaciones totales del país, con un valor FOB exportado de US$ 12.000 millones; desde ese momento hacia esta parte, las exportaciones se triplicaron, para alcanzar en el año 2020 US$ 37.100 millones. En el mismo período (2000-2020), las exportaciones totales del país poco más que se duplicaron, lo que permitió que las exportaciones de la agroindustria vayan ganando en participación. Así, alcanzaron el récord en el milenio el año pasado con el 68% del total y, a falta del segundo semestre, 2021 apunta incluso a superarlo.


Entre los principales complejos agroindustriales, al menos los que son posibles de calcular en base a la forma de disposición de la información pública al respecto, todos han visto incrementar sus exportaciones en valor de forma significativa en las últimas décadas. Sin embargo, no todos han evolucionado de la misma forma.

Haciendo el desglose de los sectores que mayor evolución relativa han mostrado dentro de lo que consideramos complejos agroindustriales, el que destaca sobremanera es el complejo avícola. Las exportaciones del complejo hacia principios del nuevo milenio eran marginales, de algo menos de US$ 10 millones en el año 2000, pero sintieron un quiebre promediando la primera década del mismo. A pesar de la variabilidad de los últimos años, la industria avícola exportó en el año 2020 cerca de US$ 332 millones, un impresionante incremento de más de 3.000 % en los últimos 20 años. La ganancia en competitividad producto de la reducción del costo industrial -vía incorporación de tecnología-, la fuerte integración de la cadena y la incidencia positiva que tuvo la apertura del comercio exterior influyeron en el despegue exportador.

El sector cerealero, por su parte, experimentó un crecimiento de sus exportaciones de 260% en dos décadas, y de más de un 70% tan solo en los últimos 5 años. Dentro del sector, el mayor incremento absoluto fue el del maíz, producto principalmente de la expansión en el área del cultivo. De este modo, entre 2000 y 2020 las exportaciones del grano y sus productos crecieron unos US$ 5,1 miles de millones (+500%). Destaca también el incremento en las exportaciones de arroz, que en 2020 concentraron US$ 1.029 millones, creciendo un sorprendente 620% en las últimas dos décadas.

El tercer sector identificado con mayor crecimiento en las últimas décadas es el sector oleaginoso, cuyos despachos al exterior se incrementaron 243% en el período analizado, y representó por si solo el 30% de las exportaciones del país en el año 2020. Las exportaciones del complejo sojero específicamente se incrementaron en un 282% en el período, aunque vienen contrayéndose en la última década por la caída en el área sembrada. La mayor suba, en tanto, la tuvo la exportación de los productos del complejo maní, que crecieron en el orden del 350% en los últimos 20 años, para superar los 1.000 millones de dólares en exportaciones por primera vez en 2020.


Por su parte, los sectores que presentaron las menores subas relativas al interior de los complejos agroindustriales fueron el Complejo Forestal (+18%) y el Complejo Tabacalero (+61%), únicos dos que no alcanzaron a duplicar sus exportaciones en valor en las últimas dos décadas.

Primer semestre de 2021

En el primer semestre de 2021, los complejos agroindustriales identificados incrementaron su valor FOB exportado en un 27%, alcanzando unos US$ 24.200 millones de dólares, casi el 70% de las exportaciones totales del país en lo que va del año.

El gran salto exportador provino principalmente desde el lado de las oleaginosas, cuyas exportaciones crecieron un 52% en el semestre, o US$ 4.500 millones más que el año pasado. Las exportaciones del complejo soja por si sola totalizaron US$ 11.500 millones (+55% en términos interanuales), principalmente producto de un incremento en los precios de exportación. Los precios FOB promedio de exportación aumentaron un 59,8% para el aceite de soja en el semestre, un 51,7% para el poroto de soja, mientras las harinas y pellets se encarecieron promedio en un 36,3%, y el biodiésel y sus mezclas un 36,1%.

Es necesario destacar, por otra parte, la buena recuperación que viene experimentando el sector forestal en este año, con un incremento interanual del 74%, y el sector azucarero que ha visto incrementadas sus exportaciones en un 60%.


Como contracara, los complejos con peor desempeño en lo que van del año son el sector tabacalero (-18%), el hortícola (-14%), el avícola (-13%) y el frutícola (-8%). Estos sectores preocupan en su evolución, producto de que, en su mayoría, sus centros productivos están ubicados en el interior del país y están dentro del grupo de las denominadas economías regionales.

Según información de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (CIARA) y el Centro de Exportadores de Cereales (CEC), entidades que nuclean a las principales empresas exportadoras de cereales, oleaginosas y productos derivados de su industrialización en nuestro país, durante los primeros siete meses se batió el récord de liquidación de divisas por parte de la agroindustria.


Los datos señalan que las empresas agroexportadoras liquidaron un total de US$ 20.179 millones en el período enero-julio, el mayor ingreso de divisas en el siglo XXI, con un aumento del 73,9% contra mismo período del año pasado. Es más, el total liquidado en lo que va del año se encuentra menos de US$ 100.000 por debajo de lo que se liquidó en todo el año 2020, y ya por arriba de otros años, como fuera el 2015.

Por Emilce Terré - Javier Treboux
Fuente: Bolsa de Comercio de Rosario