En cuanto a la matriz comercial podemos observar (último informe):
La exportación en pocos rounds fuertes de ventas, logró comprar casi 4,5 mill de tns, superando su participación del año anterior en más de un 24%. De las cuales el 29,56% (1,28 Mill de tns) no tiene precio.
La molinería, no ha participado al momento de la comercialización de trigo nuevo, cuando el año pasado a igual momento tímidamente algo había comprado.
Un dato no menor, es que de este volumen comprado con y sin precio, al momento solo 3,2 mill de tns tienen DDJJ, que podemos arriesgar a decir que es la mercadería comprada con precio.
En cuanto a precio, los futuros de trigo tuvieron el siguiente movimiento:
Las últimas semanas de la mano del mercado externo con volatilidad alcista inyectada de la mano del clima en el hemisferio norte, saco de los pisos a los precios del trigo nuevo.
Si bien seguimos relativamente lejos de los de picos de abril del año en curso, podemos apreciar que con los cierres de la ruedas de la semana que paso; los precios del futuro diciembre se pusieron por encima del promedio de los últimos 120 días, 205 u$s/tns.
Esta escalada de precios, inevitablemente nos obliga a tomar decisiones de precio sobre lo que son hoy esos lotes verdes emergentes de trigo.
Se sugiere utilizar la herramienta más alcista, con la que cuenta los coberturistas de riesgo precio: “PUT”.
Hoy la estrategia seria, capturar el precio más cercano posible al promedio antes citado (205 u$s/tns), siempre teniendo en cuenta el esquema de costos de caso particular en función de sus rendimientos promedio.
Estrategia sugerida:
El objetivo de esta estrategia, es que con la cobertura del 30% de la producción proyectada, tener una base de rentabilidad para encarar esta nueva campaña, que de por si es dominada por la volatilidad y la incertidumbre política/económica local.
Por Andrés Gosende I Analista de Intagro – Especial para Agroeducación
Fuente: Agroeducación